Nos preparamos para el viaje, yo lleve mi espada, mi escudo, mi armadura y mi bolsa, donde llevaba mana.
Algo me incomodaba, porque siempre tuvimos buena relacion con los otros dioses, lo mas rapido que pude pensar y que no lo razone es que la esfera de la muerte los afecto igual que a los humanos.
Me encontre con mis amigos en medio de un escuadron de angeles que, de seguro, irian con nosotros-Nel-me dijo Luel al verme-te esperamos un monton, solo faltabas tu.-Perdon-respondi-me quede dormido-no era cierto, menti porque si sabian que estuve pensando en la esfera me molestarian todo el viaje.
Partimos a un lugar hermoso nunca visto por los angeles jovenes, habia un jardin con flores preciosas y con adornos que si los humanos supieran que existen se matarian entre ellos para conservar los adornos.
Estaba emocionado, pero note que mi padre no estaba a gusto, ¿era por lo de el torneo?
Vi a Ares, y no nos saludaba como cuando me contaba mi padre sus aventuras en el Olimpo, sino nos atacaba; mi padre se puso al frentey le dio un golpe, que no le hizo casi nada, fui contra el enemigo que con un golpe casi me desmaya, mareado mis amigos me llevaron atras; donde al recuperarme vi una batalla epica, pero despues me todos retrocedieron y escaparon; acto seguido vi a mi padre y sus amigos prisioneros por Zeuz, al volar rapido me separe de mis amigos y me perdi.
