Living the Changes.(1D) 2º libro.

Cap 4. ¿Podre superarlo?

Kim pov.

-Ellie, enserio he cambiado de opinión, no me gusta el gesto que mantienes. Quiero verlo.-Exigí con cara seria ante la mirada inquietante de mi amiga.

-Enserio Kim, no creo que te haga un favor dándotelo.-Replicó.

-¡Vamos!.-Dije agarrando el móvil desde su mano.

-¡No espera!.-Exclamo en un tono algo elevado.

Quite el móvil de su mano apretando su dedo lentamente. Puse la pantalla brillante sobre mi mirada, viendo en la bandeja de entrada que no se hallaba ningún mensaje. Volví a mirar, pero en aquella bandeja de entrada no había absolutamente nada.

-Ellie, no hay nada, los has borrado.-Reclame.

-Pero si no me has dado tiempo.-Quejo sincera.

-Pues mira, ya no están.

-Al haberme agarrado le habré dado sin querer.

-Menuda excusa.

-Es verdad.

-Dime entonces que era lo que ponía.

-¿De verdad?.-Pregunto como si todavía dudase de mi decisión.

-Si vamos. Estoy decidida.

-Era de Niall, Quería verte para explicarte las cosas...

-Y que más.

-Que aparecieras en el big ben. Pero supongo que no iras.

-Bueno no se... Puede que alguna vez deba enfrentarlo para aparcarlo de una vez por todas.

-¿Crees que eso te ayudara? O ¿simplemente quieres que te diga cosas que en el fondo quieres escuchar?

-No, Ellie, enserio necesito hacerlo, solo no me juzgues.

-Te apoyare, pero...

-Se lo que piensas, pero ahora dime la hora.

-Creo que ponía a las 23.00 en el reloj.

-¿Segura?

-Si eso creo.-Afirmo mientras miraba mi reloj, que ya marcaban las 22,45.

-Me voy no llego si no.

-Kim...-Grito mientras salía de ahí.

-Luego hablamos, gracias.

-Suerte.-Se escuchó levemente mezclándose con el crujido de la puerta.

Salí a paso ligero hacia el aparcamiento para montarme en el coche e ir directamente al centro, tardaría un poco, pero esperaba obtener alguna respuesta y un cambio de ánimo, al decirle el adiós definitivo. Si no, no lo lograría dejar escapar jamás...

El tráfico se mantenía pesado, del mismo modo que empezaban a manifestarse mis nervios y ansiedad por llegar a tiempo a aquel lugar. Puede parecer que sea la típica tía tonta que acude al chico que le ha roto el corazón a la primera llamada de cambio, pero tenía muy claro lo que pensaba y el dolor que había sufrido... Lo único que me faltaba era decirle el adiós definitivo, para poder enterrar cada pensamiento o mueca de dolor que estaba en mi corazón de nuevo a tener que sufrirlo...

Aparque donde pude, bajándome y cruzando la calle para hallarme en el sitio de la quedada. Mire mi reloj por octava vez, marcando las 23.05. No había rastro de Niall por ningún sitio... observaba cada paso que escuchaba acerarse, pero ninguno correspondía al suyo... Estaba empezando a desesperarme y a invocar la mala idea que había tenido en venir aquí como una verdadera estúpida...