A través de la ventana ingresaba un fuerte rayo de sol, bañando de lleno los párpados cerrados de Sehun. Sin embargo no era suficiente para despertarlo. Ni la sirena de los bomberos podría hacerlo ese bendito domingo. Su cuerpo permanecía laxo sobre aquel mullido colchón y el silencio reinante favorecía a que continuara prendido a su sueño y siguiera con la respiración profunda y serena.
«¡Juguemos a las adivinanzas!»
Sehun sonrió al escuchar esa voz que incluso en sueños sonaba tan increíblemente real, como si el idiota de JongIn estuviera en su habitación.
«Es pálido como un fideo y luce como si la noche anterior le hubieran pateado los huevos hasta dejarlo inconsciente. ¿Quién es?»
Maldijo sin borrar la sonrisa en la boca y amagó a estrangular el cuello del moreno. Sabía que se refería a él y a su hermosa piel blanca de la cual estaba muy orgulloso de conservar suave y perfecta.
«Creo que es hora de que despiertes, ¿no?»
¿Por qué las personas se empecinaban en despertarlo también en sueños? ¿Acaso no podían respetar su jodido deseo por disfrutar de la cama el fin de semana?
―Nnnn-no... ㅡbalbuceó inconsciente antes de girarse de lado.
―¡Sehun! Son las dos de la tarde y creo que tu padre va a preocuparse si no regresas.
¿Regresar a dónde?
¿Preocuparse?
¿Su padre?
¿Qué diablos?Se sentó con brusquedad y parpadeó rápidamente. Al ver que JongIn estaba quieto a pocos centímetros de él, mirándolo con un brillo divertido en los ojos, se impresionó de tal manera que casi soltó un grito histérico.
―¡¿Q-qué haces aquí?!
―Pues... resulta que es mi casa.
―¡Yah! No jodas. Esta es mi... ㅡSu voz se apagó tan pronto recorrió el interior de aquella habitación y descubrió que no era la suya. Ups. Le tomó unos largos minutos entender lo que estaba pasando y cuando lo hizo, recortes de la noche anterior cayeron sobre él como un maldito balde de agua helada.
«Jo-der, ¡JODER! Y más joder.»
―¿Por qué estoy aquí y no en mi casa? ¿Por qué me trajiste, JongIn?
Jamás había tenido un ataque de pánico, pero sospechaba que se sentía tal como en ese momento. Como si le estuvieran retorciendo las pelotas y no pudiera respirar normal.
El tono urgente de Sehun hizo reír al moreno, quién se puso en pie y abrió las cortinas de extremo a extremo, permitiendo que toda la luminosidad entrara al dormitorio e hiciera contraer los párpados al castaño.
―De hecho... Tú me rogaste que lo hiciera ㅡrespondió.
Seguro JongIn le estaba viendo la cara de estúpido, pensó Sehun. No podía creer eso, aunque tampoco podía recordar con exactitud qué ocurrió. Su memoria parecía haberse transformado en una película llena de escenas desaparecidas, absorbidas por algún tipo de agujero-negro-chupa-recuerdos.
―Fue algo así como: "¡Ay! JongIn no dejes que mis padres me vean en éste estado. Por favor, JongIn. Llévame contigo, JongIn. Vamos a tu casa, JongIn. Por favor, por favor." ㅡcontinuó el moreno. Incluso hizo una actuación cómica y bastante exagerada, de todo aquello que Sehun había dicho estando ebrio. Tan ebrio como para actuar cual desvergonzado y después sufrir lagunas mentales.
«¿Tanto había bebido?»
Sehun suspiró con pesadez y hundió el rostro en las manos. Su único consuelo era que no padecía de una horrenda resaca, pero de todos modos tenía un verdadero lío en la cabeza y quería atar cabos sueltos. Aunque recordar lo que había hecho con JongIn luego de verlo con aquel chico, lo apresuró a coger todas sus pertenencias y estar listo en un parpadeo.
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Hablas mucho 🤐 :: KaiHun
FanfictionSehun es bastante callado y a diario se molesta con Kai por ser un charlatán sin remedio, pero a pesar de aparentar ser un par de polos opuestos, la atracción explota tras la super-mega-fiesta que realiza Baekhyun en su casa.