Es hielo abrasador, es fuego heldado.
Es herida que duele y no se siente.
Es un soñado bien, un mal presente.
Un breve descanso muy cansado.Es un descuido que nos da cuidado.
Un cobarde con nombre de Valiente.
Un andar solitario entre la gente.
Un amar solamente, ser amado.Es una libertad encarcelada,
Que dura hasta el postrero paroxismo.
Enfermedad que crece si es curada.Este es el niño amor este es su abismo.
Mirad cual amistad tendra con nada.
En que todo es contrario a sí mismo.Quevedo
Lucía no paraba de escribir este poema, una y otra vez en la parte de atrás de todos sus apuntes. Se sentía identificada. Muchas emociones a la vez.