QUIERO SER TUYA

729 47 6
                                    

Silvia fue dada de alta un par de días después. Su recuperación había sido asombrosamente rápida y como había dicho el doctor con un guiño, probablemente tenía mucho que ver con cierto actor.

Justo antes de abandonar el hospital jorge llego para llevarla a casa...

El único problema tuvo lugar cuando la prensa se enteró de silvia había despertado y los persiguieron a ellos Por fortuna flor y alejandro lograron entretenerlos, y pudieron escapar en un taxi.

Llegaron a casa de silvia...

—La verdad es que no sé si volveré a confiar en ti *murmuró silvia* pensativa mientras jorge deshacía la maleta.

Él se colocó detrás de ella y le rodeó la cintura con los brazos.

—No hice nada malo*le dijo*, pero cuando estés completamente recuperada te lo voy a demostrar

La actiz se apartó de él y se volvió para mirarlo a la cara.

—te digo que escuchar la voz de esa mujer me pertubo mucho... Y mas porque yo en verdad teamo. * le dijo* tuve tanto miedo de volver a verte

-Yo también pasé mucho miedo, incluso pensé que jamas volvería a escuchar tu voz *murmuró él*

desanudándose la corbata y desabrochándose los botones de la parte de arriba de la camisa

- Incluso después, cuando flor me llamo para decirme que habías despertado... incluso tuve miedo, de no poder darte lo que necesitabas, de no poder darte las cosas a las que estás acostumbrada

—Me he acostumbrado a ti, Jorge Salinas *repuso ella con dulzura*a Lo rodeó con sus brazos y lo miró a los ojos amorosamente

— incluso a tus enojos y celos. * dijo riéndose suavemente* Ya te lo he dicho*le reiteró*, no necesito nada, ni a nadie solo a ti. Además tendremos un hijo y dentro de unos años tendrá un montón de hermanitos y hermanitas....

Jorge se sonrojó ligeramente.

-¡Señor Salinas...! *exclamó ella divertida al ver su azoramiento*

-¿Siempre es usted tan tímido? * murmuró acariciándolo a través de la tela de la camisa, y desabrochándola hasta dejar al descubierto el musculoso y bronceado tórax.

-Por supuesto que soy tímido *contestó él sintiendo que le ardía la piel cuando ella empezó a acariciarla. Contuvo el aliento excitado cuando besó uno de sus pezones y enredó las manos en su bello rizado

- Oh, Dios... *jadeó*. Mmm, Silvia ...

La silvia se apartó un momento para mirarlo con los ojos brillantes de deseo.

-¿No te gustaría hacerme lo mismo a mí también? *le susurró.*

Aquella era toda la invitación que jorge necesitaba. Le desabrochó los botones del sencillo vestido color crema que se había puesto y al dejarlo caer, vio que llevaba puesto un body de encaje muy sexy con tirantes, que abrazaba deliciosamente sus femeninas curvas

-Solo tienes que tirar hacia abajo. * le indicó silvia tímidamente.*

El corazón había empezado a latirle a jorge como un loco, y no estaba seguro de poder hacerlo sin desmayarse.

La idea de ver a silvia totalmente desnuda lo excitaba muchísimo. Tragando saliva, enganchó los pulgares en los finos tirantes y fue deslizando el body poco a poco, dejando al descubierto los gloriosos senos, el estómago... más abajo, más abajo... hasta llegar a...

Erizandose de nuevo tanto que la timidez estaba empezando a evaporarse. Aquello era tan nuevo para ella como para él, y eso lo hacía mucho más hermoso, un verdadero acto de amor.

TENIAS QUE SER TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora