Vacío sin rumbo.

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Ahora estoy aquí sentada en el suelo del baño, esperando que el tiempo pase rápido para olvidar, pero los recuerdos siempre están ahí, presentes; algo que nunca tuvo que salir a la luz, algo que nadie debió ver, pues no hay marcha atrás ahora este error está como el sol alumbrando frente a sus rostros la decepción de muchos, en los ojos de todos se observa un pasillo de desprecio, asco, mentiras, rechazo y la única salida son pequeñas gotas de agua con sal.. Cayendo lentamente de mis ojos, pasando por mis mejillas, se sienten bien sus caricias; miedo-odio, se siente la tensión. Cientos de personas hablaban, preguntaban, pero yo solo pensaba: ¿por qué?, ¿por qué han sido tan crueles?. Desesperación-ansias, me impulsan a agarrar un vidrio de un espejo roto, observo lo que refleja y no lo reconozco, ¿quien es ella?, pienso, ¿qué hice conmigo?; gotas rojas caen al suelo, se siente bien el dolor, es alivio, los recuerdos duelen más que la raya en mi muñeca. Cicatrices, quedarán muchas marcandome de por vida, ayer los recuerdos solo quedaban en el pasado, pero soy un pozo, vacío y seco que es imposible de llenar, la soledad es un monstruo que me persigue, el silencio es mi fortaleza, fingir es muy fácil cuando nadie te mira a los ojos, tienes que sentirlo para saberlo, la oscuridad me cubre el cuerpo...la niebla el corazón. El monstruo va y viene, aveces llega sin avisar y me llena de terror. Cansada, cansada de mi piel. Pesadillas, sólo llenando mi mente de horror. Las personas aveces están destinadas a dañar; a dañar todo lo que ven, lo que poseen, un perdón no es suficiente cuando destruyes a alguien, cuando traicionas, cuando dañas...
Dolor, dolor siento cuando los mismos que me convirtieron en algo tan frío como la nieve, me piden que cambie. ¿Quien creó tanto rencor en mi?, ¿quien puede ser tan cruel como para destrozar cada parte de mi?. Recuerdos, siempre estarán presentes. Soy tan débil por fingir ser fuerte, por fingir que algo no me duele cuando en realidad me mata. La noche llega, la muerte me visita vestida de rojo, piel fría, tes pálida, mis ojos se cierran lentamente, siento que mi alma pide separarse de mi cuerpo, desea ser libre, sentir paz por primera vez en mucho tiempo... De momento me veo acostada en el baño, con un pequeño trozo de espejo tirado en el suelo, sangré recorre mis brazos.
Un cuerpo sin vida, y yo estoy cayendo en un vacío sin rumbo.

Confesiones de un corazón roto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora