Déjame ser tuyo

4 parte(Una reunion poco Convencional)

•Alicia•
Al pasar a la entrada del salón, me quedo estática. Veo a todos los empleados del edificio mirándome, viendo cada centímetro de mi ropa. Creo que lo que les incomoda es la forma en como me visto. No es nada malo, al contrario, es algo normal y moderno(la verdad es que no).
Cuando retiro la mirada de los empresarios, lo segundo que hago es ir a sentarme. Una secretaria trata de llamar mi atención por medio de mi nombre para que pueda ir a tomar asiento.
-Srita Alicia, por favor tome asiento al frente de la mesa.- me dice la secretaria de uno de los contadores.
-Ah.. Claro!- Respondo lo más rápido posible.
-Por aquí señorita Alicia.- Me apunta con su dedo índice una silla un tanto grande.
-Gracias.- le respondo por último.
Logro sentarme en la silla de cuero color negra, que está dando al frente de todos los empresarios, es la silla de mi padre, al parecer a el le gustaba hacer juntas un tanto convencionales para poder dirigirse a sus empleados y mostrarles las gráficas y los aumentos que ha tenido la empresa. Las ayudas y los recursos que se les brindan a los de bajos recursos y con poca estabilidad en su área. 
Algunos señores están tocando temas convencionales de la estabilidad económica, otros hablan de lo que han hecho en su fin de semana, y algunos, de lo que podría hacer como jefa.
En lo personal no me favorece la idea de que me critiquen o me tomen en pelo por ser de 18 años. Quizás ya tengo una responsabilidad pero no hay exagerar.
Cuando pasan unos minutos hablando, yo me quedo callada, mirando a los lados y esperando a ver quién es tan Valiente, para tomar la palabra y empezar a escuchar los hechos.
-Antes que todo, Buenos días a todo el personal de la empresa 'International House of Stability and real estate economy' mejor conocida como 'Arrieta house'.
La mayor parte de todos aquellos que trabajan aquí, conocieron y recuerda la fama internacional que tuvo nuestro Jefe y director de la empresa, El Sr. Miguel Arrieta, fue el que nos llevó a donde estamos hoy. Nos dio una vida completamente diferente. Tratando de entender y sobrevalorar el apoyo que le damos a los De bajos recursos, gracias a la venta de bienes raíces y su función con los magnates del mundo.
Por esa razón, estamos aquí para despedirnos de nuestro Ex Jefe, el cual no olvidaremos. Pero daremos un saludo al nuevo Director de esta Compañía, el cual nos llevará a otro nivel. Démosle la bienvenida ala Señorita Alicia Arrieta O'connell.- Termina de decir, el hermoso Dios griego dirigiéndose a mi.

Todos empiezan a aplaudir de forma espontánea y emocional. Están felices de que alguien, por parte de sangre del señor Miguel, sea quien dirija la empresa.
Al escuchar lo que dijo, mi corazón se vio cautivado por sus palabras. Hizo que toda la piel de mi cuerpo se erizada de tanta pena y emoción que tenía.
No podía creer que él fuera quién diría esas palabras. Esperaba la bienvenida de un señor mayor, pero creo que la vida me regalo la esperanza de que el fuera quien me recibiría.
Después de que terminan de darme la bienvenida. Un empleado de contabilidad me Hace la observación.
-Señorita, Al darle la bienvenida, queremos ofrecerle nuestra ayuda y todo lo que sabemos para poder refugiarnos en usted. Es la que nos llevará lejos y esperamos contar con su ayuda y su agilidad, así, demostrarnos que es capaz de llevar una empresa por sí misma.- dice el caballero, sentándose de nuevo.

Todos se quedan callados y esperando una respuesta mía, ya que me quedé muda. Es algo algo nuevo para mí. No puedo dejar que me dejen todo el trabajo pero tampoco puedo dejarlos trabajar solos. Es algo así como el karma apuñalándome, ya que debí escuchar los consejos de mi padre. Decía que el llevar a una empresa en las manos, no es trabajo fácil. Porque si cometes algo que puede llevar a la empresa a la ruina, todo se acaba.
Hasta ahora vengo a recordarlo, y me siento un poco mal al no tomarlo enserio. Pero está bien, quiero pensar que todo será por ayuda.

-Bueno, gracias a todos por su bienvenida, me siento halagada. Y si, hablando de la empresa, me comprometo a guiarlos por donde deba que ser. No tengo experiencia. Pero creo tener las agallas necesarias para poder decir que 'sí' que pueden confiar en que una Chica como yo, teniendo 18 años, puedo llevarlos a la sima, si pueden creer en mí, puede seguir conmigo, pero sobre todo les agradezco la ayuda que pueden ofrecerme.- digo entusiasta, miedosa, tímida y con Pena. Pero segura y firme.
Al terminar de decir todo Aquello. Regreso a mi lugar y rezando que mi discurso, haya tenido Frutos y crean por lo menos que soy seria.
Al final de la gran mesa redonda, escucho al dios griego tomar la palabra, levantarse y decir; - Estoy de acuerdo con ella. No tendrá experiencia, pero creo que merece una oportunidad. Tanto como ustedes como yo, crecimos con ayuda y con el tiempo. Pienso que todo te lleva a donde quieres llegar. Pero hoy, pienso que esta joven, puede llevarnos más lejos de lo que podíamos llegar-. Termina de decir el Chico de ojos verdes.
Algunos hombre se quedan viendo entre sí. Creo que algunos no están de acuerdo conmigo o con el joven de ojos verdes. El es el único que me apoya(hasta ahora).
No confían en mí, creen que puedo arruinarlo y que no todo saldrá a como lo hizo mi padre.
-Estamos de acuerdo, pero esperamos que todo salga a como debe de ser. 'Arrieta House', tuvo mucho tiempo para poder ser lo que es hoy, y esperamos ese rendimiento en usted- termina la frase el licenciado de la compañía.
Todos están de acuerdo. Me quedan viendo y esperando a que al menos mueva un dedo. Saben que estoy nerviosa y me siento bombardeada con todo lo que está pasando hoy.
-'Claro que lo tendrán'-Digo cansada y con fuerza.- Estoy de acuerdo, solo hay que perseverar para poder llegar a la sima, y eso haré.- termino de decir.
La mayoría aplaudió de nuevo y estos están completamente coherentes conmigo.
Al principio no les parecía, pero creo que solo tienen miedo de que al menos pierda la mitad de las acciones, (eso no pasara).
Es un camino largo pero creo poder hacerlo.
Al final de todo esto, la junta se dio por terminada. todos salieron poco a poco, se acomodaron las sillas, y yo me quede en la misma silla. Mi mente estaba en blanco. No quería pensar más. Me sentía exhausta y sin fuerzas, sin esperanza y con tristeza. Baje la cabeza mirando al suelo. Mis manos estaban apoyadas en la silla y mi cuerpo de igual manera, tratando de dirigirme al piso. Todo podía acabarse para mí. No tenia gran esperanza en mi. Les prometí algo que quizás no cumpla, pero ahora tengo que hacerlo.
Para mi sorpresa, sentía una pequeña presencia. No le di importancia y seguí con mis pensamientos pero, en un movimiento poco digno de mi, quise levantar mi cabeza, creía que ya todos se habían ido, ya que no escucha sonido alguno.

A lo lejos pude ver la cara de alguien, me estaba viendo. Nuevamente levante la cabeza y para mi sorpresa, seguía ahí.
El.