Espera por mí [III]

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Alerta, miraba hacia todos lados, las ventanas, las calles, las personas que caminaban a su alrededor.

—Vete —le dijo con decisión—, no vayas a casa, ve donde Kibum.

—Minho no voy a dejarte —Taemin se había agachado, ayudándolo a incorporarse—, además no tengo como...

—Jonghyun está aquí —ladeó la cabeza en dirección al auto negro que doblaba en la esquina y se detenía cerca de ellos.

La puerta se abrió y en ella Taemin pudo ver al otro hombre que había desparecido con Minho. Jonghyun estaba más guapo pero con el rostro lleno de angustia, lastimosamente ese fue el primer detalle que captó.

— ¡Súbanse! —gritó quitar lo seguros de las puertas.

—No preguntes —de nuevo Minho se había adelantado a las preguntas que Taemin quería hacerle.

Pero no protestó, lo ayudó a subirse al auto y una vez todos dentro, Jonghyun se puso en marcha.

—Hola huyng —sabía que era el momento menos adecuado pero le daba tanta felicidad verlo de nuevo que no se guardó el saludo.

—Hola Taemin. Tanto tiempo sin vernos —Jonghyun lo miraba por el espejo—, ¿cómo está su hombro?

—Estoy bien, la bala solo me rozo.

—Estas sangrando mucho eso no fue solo un roce —lo reprendió Taemin.

Se miraron largo rato, nuevamente Minho lo sorprendió, esta vez dándole un beso en los labios.

—Estaré bien —no le gustaba para nada el dolor en los ojos del castaño.

—Sabes que no es verdad.

—Jonghyun...—Minho lo ignoró no queriendo discutir en ese momento.

—Kibum nos espera—el alto asintió.

— ¿Qué sucede Minho? ¡Maldita sea dímelo!

—Cuando lleguemos a casa de Kibum te lo contaré, te lo prometo.

Taemin iba a gritarle que se vaya al demonio pero ya no estaba prestándole atención. Viajaron en silencio hasta el departamento de Key. Cuando estaban ya en el edificio vio a Jong sacar un arma de la parte trasera de sus pantalones y colocarse enfrente como barrera, la tensión era mayor a cada paso hasta llegar al departamento indicado.

Pero vaya sorpresa que se llevaron cuando descubrieron la puerta de key abierta.

— ¡No! —ese había sido Jonghyun, el primero en entrar y en encontrar el desastre que había ahí dentro, era como si una tormenta acabara de pasar destruyendo todo a su paso.

Pero nada los preparó para ver la siguiente escena.

Atado de manos y pies, golpeado y arrodillado junto al sillón individual, como una mascota que se había portado mal, siendo acariciado por unas manos que estaba deseoso de arrancar, se encontraba Key.

Jonghyun se juró arrancarle el corazón al culpable con sus propias manos.

—No pensé que seguirías vivo Minho.

Onew paseaba la mano en los cabellos oscuros de Key, este apenas consciente empezó a llorar en cuanto vio a Jonghyun en primera fila y detrás de él a Minho siendo sostenido por Taemin.

—Debí matarte cuando pude —gruñó Minho.

Onew chasqueó la lengua con diversión—. No lo hubieras podido conseguir —posó la mirada hacia Taemin—, hola querido, lamento que una vez más estés involucrado en nuestros negocios.

Espera por míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora