Mas debil que una hormiga

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  Mis lágrimas Caían más rápido y un torbellino de emociones se instalaron en mi corazón.
No tenía manera de escaparme de el.
En la calle no había nadie, sólo yo y un carro que se aproximaba desde lo lejos.

Cuando llegamos al anden me subió en su hombro y tuve la opción de empezar a patalear, tenía que luchar por mi vida, estaba decidida a que no iba a acabar así.

Logan

Pude ver a lo lejos a un hombre que llevaba a una chica en sus hombros, yo sabía que algo andaba mal.
No podía suponer que era su novia por que ella se oponía a su comportamiento  y además de la soledad que acompañaba la noche, tenía que ser un secuestro.

Parque el auto en una tienda llamada
love groceries  

Ya había pasado por aquí unas veces antes y sabía que era bastante solo.
Baje del auto dispuesto a salvar a esa persona, nadie sabría quien soy por que me iría enseguida.
Dejaría inconsciente al hombre y le dejaría libre la vía para que hulla de su opresor.

Estaba acostumbrado a hacer este tipo de cosas, saltar de aviones, trenes, autos, infinidades de cosas en movimiento y esto no sería problema para mi.

Busque una capucha negra que llevo siempre en el baúl y me la coloque para ocultar mi rostro. Sería un tipo como el fantasma de la noche o algo así.

Cruce la calle y a medida que me acercaba podía escuchar los gritos desesperados de aquella chica.
Veía sus cuerpo luchar con todas sus fuerzas para escapar de aquel hombre que era un completo bastardo.

Antonia

Pude ver a lo lejos un hombre que se acercaba, su aspecto era oscuro y pensé por un momento que era el secuaz de mi asaltante.

Sentí al fin después de tanto luchar soltarme de sus garras.
No sabía sí confiar en aquel hombre que pasaba por allí pero el era mi única salvación.

Logan

La chica empezó a correr con todas sus fuerzas y mientras corría su cabello se apartaba de su rostro y  su cara se me hacia muy familiar.

No podía negarlo, nunca olvidaba un  rostro y sabía perfectamente quien era.

El hombre empezó a correr detrás de ella y en pocos segundos la volvió a atrapar.
No podía dejar a Antonia, mi identidad podía ser revelada pero no cargaría con ese cargo de consciencia.

Camine más rápido acercando a la escena que vivía Antonia, casi nunca sentía esta sensación de tener que salvar a alguien que fuera de una persona cercana a mi ,gracias a que no tengo ni tendré absolutamente ninguna relación, pueden salir lastimadas por mi culpa y no quería volver a sentir eso, con mis padres lo viví y no pretendo volverlo a sentir.

Antonia luchaba con todas sus fuerzas O través para escapar pero el bastardo la tomo por el cabello y la tiro hacia el pasto montando se encima de ella.
Podía sentir la ganas de querer golpearlo hasta que no respirara más.

Ya me encontraba al frente de ellos, tome al bastardo por el cuello y lo alejé de Antonia lo más que pude.
Sin mucho esfuerzo lo noquee de un solo golpe.

Me encontraba esperando que algo sucediera, no sabía sí dejar ver mi rostro y ganarme más de mil preguntas o simplemente salir de allí.

Estaba de espaldas cuando sentía que Antonia empezaba a llorar más fuerte.
No podía dejarla sola.

Antonia

Quien era el?
Por qué me había ayudado?

No sabía quien era, llevaba una capucha negra y estabas de espaldas mientras yo no podía consolarme con mi llanto.

Me puse de pie ya que estaba tirada en la grama. Nunca me imagine que esto pudiera ocurrir, no tuve malicia indígena para pensar que alguien podía hacerme daño y gracias a Dios había salido ilesa.

Estaba dispuesta a decirle lo mucho que estaba agradecida con el, había sido mi Salvador, mi ángel.

Pero no pude evitar cambiar el semblante de mi rostro cuando lo vi. Otra vez me encontraba con esos ojos azules que me traían paz y ahora si que no entendía absolutamente nada.

Logan

Me saqué la capucha de la cabeza, no podía dejarla allí sola, podía que no me agradara tener que relacionarme con ella pero esto era una situación diferente.
Sus ojos dejaron de llorar, su semblante estaba muy pálido y su cara sucia por que aquel bastardo la había arrastrado por toda la grama.
Sus piernas estaban rojas, raspadas e hinchadas y su debilidad la hacia ver muy vulnerable, y aún así Elizabeth pretende que haga parte de una agencia de espías si no puede ni siquiera imaginarse que existen personas como el bastardo de esta noche.

Podía sentir la tensión en el aire, sabía que las preguntas comenzarían.

Antonia

Logan??- dije tan confundida.

Mire sus ojos buscando alguna respuesta a todo. Que hacia el aquí??.

No te preocupes por eso ahora. Vamos a mi casa y allá hablamos sobre esto, si?- dijo Logan sin dejarme terminar de interrogarlo.

Intenté caminar cuando Logan me dijo lo siguiera, pero me fue imposible, tenía mucho dolor y me ardían las heridas de las piernas.

Caí al suelo, no soportaba, estaba exhausta, ya no tenía fuerzas.

Logan me cargo en sus fuertes brazos y me llevo hasta el auto que se encontraba en el lugar donde supuestamente tenía que estar.

Estaba cansada y sólo pensaba en relajarme. Apoye mi cabeza en el espaldar de la silla y no me acuerdo cuando caí profundamente dormida.

En mis sueños solo podía ver otra ves al
Bastardo, sucio y asqueroso que me tocaba todo el cuerpo, podía sentir que me tocaba con sus culpables manos y yo no podía defenderme.

Logan

Antonia había quedado dormida en todo el viaje, fruncía su ceño de ves en cuando y me imaginaba que se sentía aturdida por lo que había sucedido.

Fue tranquilizante que hubiera quedado dormida, por que el viaje fue tranquilo y me dio oportunidad de planear lo que sucedería cuando llegará a casa.

Parquee el auto el garaje y aún Antonia estaba dormida. Me quede un momento esperando a que se levantará, no quería apresurarla.

Antonia

Sentí que el auto se detuvo y aún Logan no salía del auto. Abrí mis ojos y me encontraba todavía en el auto, Logan seguía en el mismo lugar donde me acuerdo y mis nervios empezaron a calar en mi corazón.

Vamos.- dijo Logan saliendo del auto y caminado hacia mi puerta para abrirla.

Puedes caminar?- preguntó

Hice el intento de ponerme de pie, pero se me hizo imposible aún estaba débil.
Logan me sujeto por el brazo antes de que cayera,en ese momento nuestras miradas se entrelazaron y sentí aún así cansada como mi corazón se aceleraba a mil.






Chicas disculpen la demora.

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