3

12 1 3
                                    

Al llegar a la escuela, como Samantha ya había pensado que sucedería, los profesores se habían enterado de la noticia, para su suerte, nadie más sabía, en clase, sus compañeros no le dijeron nada, hasta que una chica, de cabello marrón y ojos celestes tan claros como el agua se le acerco y le dijo
-hola Samantha, me gustaría hablar contigo en en recreo - dijo con una sonrisa en el rostro - me alegraría mucho que lo hicieras.
Samantha se limitó a asentir con una pequeña sonrisa, la niña muy sonriente se fue dando saltitos hasta su pupitre. Llegada la hora del recreo la niña espero a Samantha en la puerta del salón y le dijo que vayan a un lugar alejado de todos los gritos producidos por sus compañeros, Samantha seguía sin articular sonido alguno, tal vez por timidez, así que se limitó a seguirla.

Ya alejadas de todo el bullicio se sentaron bajo la sombra de un árbol y muy rápidamente la niña comenzó a hablar.
-No nos hemos presentado como debe ser así que bueno, mi nombre es Valeria-Dijo con una voz increíblemente rápida.
-mi nombre es Samantha, pero creo que esto ya lo sabias.
-si, bueno he escuchado a unos profesores hablar sobre ciertas cosas y quería asegurarme de que fueran ciertas.
-¿a que te refieres?-pregunto Samantha.
-lo de tu madre, ya sabes-dijo Valeria con una calma impresionante.
-ahh, eso, si, es cierto-dijo Samantha tratando de contener las lágrimas.
-quiero que sepas que a mi me pasó lo mismo años atrás así que no debes sentirte rara, prometo ser tu amiga-dijo Valeria.
En ese momento Samantha sintió que por fin tendría una amiga que la comprendía.

xxxxxxxx

Hola? Bueno, parece que sólo escribo para una persona, y realmente me gusta, porque tengo la certeza de que alguien me esta leyendo, espero que tengas un buen día (si, sólo una persona) y gracias por leerme

All the Love.
L.

Lo que cuenta esta en el interiorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora