Cuenta la leyenda urbana que un indigente, para protegerse de las frías noches otoñales a la intemperie, decidió cubrirse con una gran esponja blanca que encontró cerca de un basurero de un estadio de fútbol americano. La esponja cubría todo su cuerpo de cintura para arriba y, por lo tanto, realizó unas incisiones tanto en los ojos, nariz y boca... por miedo a asfixiarse mientras dormía.
Durante una gélida noche, un grupo de alcoholizados en plena despedida de soltero acabaron en el mismo callejón donde yacía prácticamente oculto el indigente, que dormía plácidamente y completamente acurrucado en el interior de la esponja. La gran esponja blanca comenzó a ser meada por esa turba de borrachos que llevaba aguantándose la micción durante todo la noche. Su orina, debido a las mezcla de fuertes licores consumidos, era muy ácida produciendo fuertes corrosiones en algunas zonas. Los líquidos y lluvia dorada en long-play continuaron durante largos minutos produciendo un color muy amarillento y homogéneo...
A la mañana siguiente, el indigente había dormido tan plácidamente y tan calentito durante su primera noche en todo el otoño (gracias también al calor de la orina de los alcohólicos) que no se percató ni siquiera que seguía llevando la esponja meada puesta... y se fue a la plaza donde solía pedir limosna. Extrañado se quedó cuando todo el mundo no paraba de lanzarle monedas y sonreírle. ¡Vaya éxito!, pensó... Todos los niños de la zona llegaban para hacerse fotos con él y darle dinero a cambio. Obviamente Bob, así se llamaba el indigente, se dio cuenta del motivo y ni corto ni perezoso invirtió las ganancias de ese día para dormir en una cama y comprar globos que vender a los niños al siguiente. Su fama se extendió rápidamente por el lugar y le apodaron Bob Esponja. No tardó ni un año en retirarse gracias a todo el dinero que ganó generando un universo con nuevos disfraces para otros indigentes. De repente, un día desaparecieron todos... y nadie supo de Bob Esponja y sus amigos... pero aquellos del lugar se quedaron sorprendidos al ver que la serie de Nickelodeon contenía exactamente los mismos personajes que tan buenos ratos les hicieron pasar tiempo atrás...