El chico de al lado

sesenta (FINAL)

Sebastian leía la carta que le había dejado Luciana aquella tarde de octubre. Mientras la leía, cada palabra le hacía recordar a ella y cada vez que comenzaba una largaba una lágrima. Él, estaba dispuesto a despedirse de ella, sin importar qué.

Hizo hasta lo imposible para encontrar con exactitud en qué hospital se encontraba Luciana. Hasta que lo logró. Se dirigió hasta allí, con la esperanza de despedirse de ella.

Al llegar, preguntó en la recepción en qué habitación se encontraba. Subió al ascensor y enseguida llegó al cuarto. Tocó la puerta, quien se la abrió lentamente la madre de Luciana. Sebastian estaba nervioso, callado, enfurecido, triste, tenía todos sus sentimientos y emociones mezcladas, no sabía qué hacer. Luciana estaba recostada en la cama, durmiendo. Los padres de ella los dejaron solos, para que Sebastian pueda despedirse.

-Lily... - dijo Sebastian despacio y bajo para despertarla lentamente. - Despierta, tengo que decirte algo, soy yo, Sebastian.- dijo con algunas lágrimas en los ojos.

-¿Qué... qué haces aquí?- dice Luciana despertando.- Te dije que no vinieras.

-Tenía que hacerlo, te extrañe muchísimo.- Dijo él abrazándola.

-Lo sé, yo también.- Dijo aceptando su abrazo.

-Lily...- dijo Sebastian.- ¿Puedo preguntarte algo?

-Sabes que sí.- Dijo Luciana.- ¿Qué sucede?

-¿Quieres...- hizo una pausa para poder arrodillarse.- casarte conmigo? Sé que es una locura pero...- Luciana lo interrumpe.

-¿Estás completamente loco?- Dijo elevándose un poco de la cama.- Sebastian, aún no se cuando... ya sabes, ¿Y tú vienes a pedirme matrimonio? ¡Tenemos 17 años! Recuerda que tú tienes una vida por delante, te casarás y tendrás hermosos hios, pero no será conmigo. No quiero que arruines tu vida.

-¿Piensas que me la voy a arruinar? Eso es todo lo contrario, me haría la persona más feliz del mundo que te casaras conmigo Lily. Por favor...

-Sebastian, sí.

-¿Si?- Dijo emocionado.

-Sí, solo para hacerte feliz.

-Tú me haces feliz.- Dijo abrazándola.

***

El 2 de noviembre se casaron, Luciana falleció el 14. Los enamorados no saben decirse adiós, se acompañan siempre.

FIN.