Seis humamos atrapados por casualidad en el frío inclemente,
Cada uno con su cayado de madera, deja que te cuente.Su fogata moribunda perdía ramas, y el primer hombre se negaba, pues notó que, entre los demás, había un negro a quienes detestaba.
El otro nombre notó a otro que no era de su fe religiosa,
y no fue capaz de dar al fuego su cayado de madera ruidosa.El tercero vestía harapos, se arropó con su abrigo,
¿para qué dar su cayado para un rico que no sé que no es su amigo?El rico retrocedió y pensó en su tesoro,
Y como cuidarlo de los pobres, haraganes sin decoro.El hombre negro pensó en vengarse cuando el fuego se extinguía y qué su cayado sólo serviría para castigar al blanco y su altanería.
El último hombre de este lastimero grupo nada hacía sin garantía,
dando sólo a quienes le daban a cambio en igual medidaSosteniendo sus cayados, ya muertos, en demuestran el pecado y el infierno:
no murieron por la helada exterior, sino de frío interno
ESTÁS LEYENDO
Frases y citas
Random¿Nunca te ha sucedido algo que te haya hecho recordar alguna frase? ¿Alguna vez te ha pasado que en alguna situación difícil incluso tu mismo creas una frase? ¿Sabes cuál es tu frase favorita?