1. La buena suerte ✅

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¿Han sentido ese sentimiento de placer cuando encuentras un momento para estar con tu novio? Bueno, ese sentimiento tengo ahora mismo. Por fin había conseguido tener un poco de tiempo con Mason, luego de tantas mierdas de la escuela, y él de su trabajo e igualmente de la escuela. Muy estresante.

Me senté en el banco del parque, esperando a mi novio para que se siente a mi lado. Caminaba lentamente y desinteresado, con el fin de estar junto a mi, pero el timbre de su móvil lo interrumpió.

¿Quién demonios ponía como timbre de llamada a un vaca mugiendo? Ah, sí. Él.

-¿Si?-contestó nervioso, lo quedé mirando fijamente. Me gustaba hacer eso, en especial cuando las personas se ponían nerviosas-¿Ahora ya?... Pero estoy con Chrissy y... Bien, ya voy-colgó mirando su IPhone.

Y yo aquí con mi Nokia.

-¿Qué pasó, amor?

-Mi papá me necesita en su oficina, pero si quieres...

-No, no te preocupes-lo interrumpí con una sonrisa-, me voy con Ryan. Aunque me debes una tarde completa-lo apunté con el dedo, nuevamente mirándolo fijamente.

Asintió para luego besar mis labios. Nos quedamos así unos segundos, pero nos separamos porque no queríamos que pasara algo descaradamente descarado en público. Sí, ese momento.

Ahora a casa de Ryan.

(...)

Caminé por el gran pasillo de piedras de la casa de Ryan, toqué la puerta con mis nudillos. Esas ventajas de ser millonario; tener una casa gigantesca y preciosa. Nadie había respondido ante mis educados llamados. Y como la rebelde que soy, entré por la cocina. Si esta familia no me conociera, dirían que estoy entrando a propiedad privada. Escuche sonidos por el pasillo, que llevaban en dirección a la habitación de mi mejor amigo. Alegremente, abrí la puerta de golpe. Sinceramente, no fue una buena idea, porque...

¡TENEMOS UN 3312, TENEMOS 3312!

-¡Chrissy!-me gritó, tapándose con el cubre camas-¡Se toca la puerta, pervertida!

-¡Y yo qué iba a saber que estabas...! ¡Agh, asqueroso!

Asco, asco, asco, asco, asco. Tapé mis ojos con mis manos para no ver tal barbaridad. Bueno, ni que no hubiera visto un pene en toda mi vida.

-Tú soló vístete, ¿sí?, te espero abajo-me di la vuelta y destape mis ojos-¡Te lavas las manos!¡Me tocas con esas sucias manos y te golpeo!-le grité y cerré la puerta.

Cinco minutos. Diez minutos. Quince minutos y Ryan aún no salía. ¡Aún no salía de sólo vestirse y lavarse las manos! Parece chica. Me acerqué lentamente a su habitación

-¿Estás haciéndolo de nuevo?-le pregunté con mis ojos cerrados. Hay que tener precauciones. Luego se abrió la puerta.

-Para tu información, estaba vistiéndome y lavándome las manos-se defendió con cara de ofendido.

Rodé los ojos.

-Bien-dijo ya abajo-¿Qué quieres?-preguntó al bajar las escaleras en forma de caracol.

La mierda. Me mareo aquí.

-¿Qué tramas con Melissa? Han estado muy juntos los dos-lo miré directamente y con sonrisa pícara. Siempre he shippeado a Rylissa... Debo pensar en un nombre nuevo.

-No puedo decirlo...-lo miré sorprendida.

-Pensé que eramos mejores amigos...

Puto mentiroso.

-¿Sabes qué? Guárdate tus secretos, me voy, cusbai-le mostré una sonrisa falsa y me marché.

Salí y me quedé en la cera de la calle. Oh, los magníficos planes de Chrissy Brown han vuelto.

Marque el número de Melissa y me contesto agitada.

-¿Si?

-¡Hola Melissa! ¿Cómo estás?-miré mis uñas pintadas de azul.

-Pues... Bien ¿y tú?

-Bien, hey, ¿puedes venir a mi casa?-le pregunte entusiasmada.

-Oh, Chrissy, no puedo, voy en camino a la casa de Ryan.

Oh sí, es mi oportunidad.

-Bien...-traté de sonar desinteresada-Adiós-corté.

Me fui a esconder a unos arbustos a esperar hasta que Melissa llegue,no se va a tardar tanto ni diez minutos porque su casa queda cerca.

(...)

Bien, llevo tres malditas horas aquí, hasta creo que me he dormido cuatro veces. ¿En camino? Sí, y yo tengo pelotas. Creo que tengo la cara llena de saliva y hojas, genial. Nueva moda.

¿Ese sonido no son tacones?

Levanté la mirada, encontrándome con mi amiga. Dios mío, qué puta se ve. Es mi mejor amiga, pero hay que ser sinceros alguna vez en la vida, ¿no? Se acercó a la puerta para tocar el timbre y la abrió un somnoliento Ryan le dijo algo que obviamente no pude escuchar y le dio un beso en la mejilla.

Me apresuré a entrar por la puerta trasera donde daba a la cocina, la misma por la que había entrado principalmente. Wow, esta casa la conozco mejor que la mía, y literal, apenas sé donde está el baño en mi casa. Iba despacio para que no me vieran pero a la vez iba rápido, ¿entienden? Creo que sí. Giré la cabeza bruscamente y, la buena suerte está de mi lado hoy.

Choque con las sartenes que estaban colgando, genial.

-¿Qué fue eso?-alcancé a escuchar

-No lo sé-dijo la ronca voz de Ryan-. Iré a verificar, no te muevas de aquí, ¿ok?

No, no, y no.

¡Dios, dime qué te hice!

_____

¡Hola! Soy Nicol, mucho gusto;) Acabo de reeditar el capítulo y, sinceramente, ¿cómo mierda tuve una ortografía de mierda el año pasado? Ah, no importa.

¡Voten y comenten! Es una gran forma de apreciar el gran trabajo que nos da hacer ésto. Muchas gracias:D

Les quiero.

PD: Chrissy en multimedia.

Como Si Fuera Cierto [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora