Un amor de Verano

Capítulo 1 Noche de chicas

Estaba en un profundo sueño cuando de repente mi alarma comenzó a sonar...

¡Agh! No puede ser pero gracias a Dios hoy es viernes y es el último día de clases.

- Oh si al fin vacaciones de verano. Exclame estirando mis brazos.

Me levante de la cama, me metí al baño y me di una larga ducha.Cuando termine salí con la bata puesta y una toalla alrededor de mi cabeza.

Estaba escogiendo mi ropa cuando de repente mi mama entro a mi habitación.

- Mama te he dicho miles de veces que toques la puerta antes de entrar. Exclame furiosa volteándola a ver.

- Lo siento hija. Contesto mi mama acercándose a mí.

- Esta bien. Conteste sentándome en la cama.

- Hija te tengo una increíble noticia. Exclamo mi mama emocionada.

- En serio... Y ¿Qué es? Pregunte levantando las cejas.

- Que este fin de semana nos vamos de viaje. Contesto con una sonrisa.

- ¿Qué? No, no puede ser. Exclame boquiabierta.

- Y ¿Porque no? Pregunto.

- Porque este fin de semana quede de juntarme con mis amigos. Conteste poniéndome de pie.

- Ay no hija lo siento pero eso no va poder ser porque tu padre ya reservo las habitaciones.

- No puede ser, siempre es lo mismo con ustedes... Hacen todo sin consultarme ¡Eso no es justo! Exclame furiosa.

- Tranquila hija, solo es un viaje nada más. Contesto tratando de tranquilizarme.

- ¿Sabes qué? Ya estoy cansada siempre me tratan como una niña. Conteste furiosa.

- Cariño tu sabes que eres nuestra única hija y queremos lo mejor para ti. Contesto acercándose a mí y poniendo una mano en mi hombro.

- Si lo se... Pero es que yo ya estoy grande y necesito tiempo para mí sola. Conteste sentándome en la cama y frunciendo el ceño.

- Te entiendo hija... Pero por favor acepta ir a este viaje con nosotros. Contesto mi mama sentándose junto a mí.

- ¡Agh! Está bien mama. Conteste entrecerrando los ojos.

- Gracias cariño, te prometo que la pasaremos muy bien. Contesto con una sonrisa.

- Eso espero mama. Conteste poniéndome de pie.

- Si por supuesto... Bueno te dejo para que termines de arreglarte. Contesto poniéndose de pie y caminando hacia la puerta.

- Si claro. Conteste frunciendo el ceño luego cerró la puerta y me dirigí al closet.

Tome mi ropa, me cambie y luego baje las gradas.

Entre a la cocina, abrí la refrigeradora, tome un bote de jugo y me serví en un vaso.

- Hija ¿No vas a desayunar? Pregunto mi mama.

- No mama gracias, no tengo hambre. Conteste sentándome en la mesa.

- Esta bien hija como quieras. Contesto saliendo de la cocina.

- Oye mama por cierto te quería preguntar ¿Puedo invitar a mis amigas esta noche para hacer una pijama? Pregunte.

- Si por supuesto que si hija. Contesto.

- Gracias mama... Bueno ya me voy, si no se me va hacer tarde. Conteste poniéndome de pie y dejando el vaso en el fregadero.