Capítulo 30

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Narra Jane:

Ya han pasado tres años desde que me casé con Jeff, ahora somos una familia los cuatro, él, yo, Driss y Damian. Todos estábamos en una casa en la ciudad, si, nos mudamos hace unos meses, la casa que teníamos en el bosque no tenía suficientes habitaciones y menos para dos niños, así que ahora tenemos una casa más grande. Yo conseguí un trabajo con un sueldo más que suficiente para poder pagar todo, Jeff sigue matando, y está mostrándole a nuestros dos pequeños como matar en caso de emergencia o de aburrimiento.

Todo estaba perfecto, Driss es nuestro pequeño de ojos azules, Damian es su gemelo de ojos verdes. Damian tiene su pelo castaño ondulado mientras que Driss lo tiene liso y laceo, son como casi dos calcamonías de Jeff y yo.

La semana pasada vinieron Nina y Jack a casa con su hija Emily, quien se hizo amiga de los gemelos. Ahora mismo estamos en casa, Jeff y Driss están recortados vagamente en el sofá viendo la tele mientras que Damian observa desde su trona como preparo la comida.

-Jane: Damian, te gusta como cocina mama?

El pequeño ojiverde soltó una pequeña risa e intentando pronunciar palabras.

-Damian: Ci :3

-Jane: Jaja, y tu vas a querer cocinar como mama?

-Damian: Ci :3

-Jeff: Janeee, a ver si ahora se nos hace maricon con todas las chorradas que le dices!

-Jane: Esa boca Jeff!!

Driss viendo a su padre mirar hacia otro lado aprovechó para coger su martillo de juguete y comenzar a darle en la cabeza como si de una piñata se tratara.

-Jeff: Driss!!!

-Driss: Maricon!

-Jane: Jeff!!

-Jeff: A sido el niño, no yo!!

El gemelo ojiazul reía sin parar, Driss era como su padre, molesto, juguetón, bruto, pero le queremos mucho, sobretodo Jeff, era como una versión de él solo que más pequeña y frágil.

Terminé de cocinar y llamé a todos a la mesa, a lo que acudieron padre e hijo tan rápido como si la vida les fuera en ello. Estábamos todos sentados y Jeff y yo hablando sobre unas cosillas para los peques.

-Jane: Deberiamos coger plaza para la guardería, ya dentro de nada tienen que empezar a ir al cole

-Jeff: Pues vamos a ver como lo hacemos, si pagamos también el colegio tendremos que quitar de en medio algunas cosas

-Jane: Como cuales?

-Jeff: Nada de vacaciones grandes, ni regalos caros...

-Jane: Estoy esperando a que me den un ascenso en el trabajo, con eso y mi aumento de precio podremos pagar de sobra el colegio de los niños y algún pequeño capricho

-Jeff: Esperemos que así sea...

(...)

Han pasado ya por lo menos 33 años desde que te conocí Jeff, que rápido pasa el tiempo, cuando ya te das cuenta, tus hijos ya tienen esposa e hijos, tu ya no eres tan joven como antes, pero vives una vida más tranquila.

Es una gran pena que no estés aquí conmigo, te gustaría todo lo que está pasando ahora.

Hace unos meses, Emma, la esposa de Driss, dio a luz a una hermosa niña, la primera bebé en la familia, ahora somos abuelos, Damian espera a otro, pero ese tardará un poco más en llegar.

Ay Jeff, si supieras lo mucho que extraño tu presencia, pero claro, quien diría que hace dos años te perdimos a causa de aquel accidente, aún lo recuerdo como si fuera ayer.

Intentamos los dos matar a una familia justos, pero la cosa salió mal, quien diría que el hombre de la casa tenía permiso de armas para manejar una pistola.

Recuerdo aquella bala te dio en el pecho, como se llevó tu vida por delante, como me dedicaste tus últimas palabras...

Te quiero...

Todos nuestros recuerdos me vienen a la mente, tantos buenos recuerdos, quisiera repetir todos aquellos cada día, si pudiera.

No se si puedes oírme o verme, pero quiero que sepas, que te fuiste de aquí, pero no de mi corazón, que el día que llegue mi lecho de muerte estaré feliz sabiendo que por fin estaré con el hombre que cambió mi vida. Los niños te recuerdan como el mejor padre y asesino de la historia, dicen que les contarán a sus hijos tus historias, como eras de hábil con tu cuchillo, que por cierto, aún lo guardo en tu mesilla de la habitación, todavía tengo todas tus cosas, créeme que no pienso tirarlas.

Por todo esto, por todo el tiempo que estuvimos juntos, por todos los progresos que hicimos, por toda la felicidad que nos has dado, quiero decirte, gracias, por estar a mi lado, por nunca dejarme sola, por quererme tanto como yo a ti.

Hace poco fui al médico, diagnosticaron una enfermedad en mi que no tiene cura, me dijeron que tenía un límite de vida, pero lo les dije que no quería saberlo, mejor no esperarse cuando viene, verdad?

Aun así se que no me queda mucho de vida, y sé que pronto me iré de aquí, por fin ya podré estar contigo Jeff, estaremos los dos en un mundo mejor, ese día llegará pronto, y cuando llegue, pienso repetirte la misma frase una y otra vez toda la eternidad, quiero que nunca olvides mis palabras, quiero que sepas que...

Te quiero, siempre estarás en mi corazón...

No se si odiarte o quererteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora