Capítulo 8

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Me empecé a arreglar para salir, me bañé, me heche perfume, modele frente al espejo, fingi que ganaba un premio, que lloraba de alegría y aventaba besitos a todos ...aish!, aveces soy muy raro.

Me terminé de vestir, ya que andaba en boxer. Aún creo que es raro salir con Evan, él nunca me había invitado a salir, bueno quizá quiera abrirse un poco más.

Bajé las escaleras rumbo a la puerta. -Mamá, papá, ya me voy, vuelvo en un rato-.

-Si hijo, cuidate mucho, ¿llevas dinero?-.

-Si, no se preocupen-. Corrí, ya que no quería que me empezaran a interrogar, aunque supongo que creen que saldré con Seung, pues ja-ja no soy tan antisocial como creían.

Me propuse a caminar al cine, pero recordé que me habia bañado e iba a sudar si caminaba, así que tome un taxi.

Al llegar pude notar a alguien con una camisrta roja y unos jeans oscuros entallados, observando fijamente su teléfono, me acerqué, puesto que se parecía a Evan por su cabello; tenía miedo de que no fuera él y pasar una vergüenza.

Toqué su hombro con timidez y al voltear me di cuenta de que sí era él.

-Hola Ji-. Me saludó con una sonrisa que rara vez veo en su rostro y se me acercó al rostro para besar mi mejilla.

-Ho-hola-. Aún no me acostumbro a su saludo de beso. -¿Llevas mucho rato esperando?-.

-No, llegue apenas, te iba a mandar una mensaje, pero recordé que no tengo tu número-.

-Jaja cierto, bueno vamos a ver esa película-. Iba rumbo al cine para que compraramos los boletos, pero me detuvo.

-¿Tan rápido?, pero aun es temprano, anda, vamos a pasear un poco-.

-Bueno, vamos-. Tomó mi brazo y nos alejamos de ese lugar.

Comenzamos a pasear por el centro comercial hasta que lo vimos. Podría jurar que mis ojos se iluminaron al verlo, mi corazón comenzó a latir rápidamente y casi casi pude escuchar a los ángeles cantar ...la heladería, es tan hermosa.

-¿Ji ...quieres un helado?-. ¡SI!

-Claro, me gustaría-. Lo miré emocionado.

-Me lo imaginé, te detuviste de repente y te le quedaste mirando-. Rayos, que vergüenza.

-Oh, no quería ser tan obvio, lo siento-.

-No te disculpes, hasta eso, fue algo lindo de ver-. ¿Qué acaba de decir?, ¿quién eres tú y qué le hiciste a Evan?

Nos acercamos, yo pedí un helado de chocolate y vainilla, él sólo de chocolate.

-Vaya, te brillan mucho los ojos, ¿tanto así te gusta el helado?-. Preguntó divertido.

-S-si, me encanta, es muy rico-.

-Jaja, la verdad si. ¿Cuánto va a ser señorita?-.

-Yo pago lo mío, ¿Cuánto fu..-.

-No Ji, yo lo pago, yo te invité-.

-No es necesario, enserio-. Me detuvo la mano para que no diera el billete y ofreció el suyo.

-Bueno ...gracias Evan, fue amable de tu parte-. Me respondió con una sonrisa.

Seguimos paseando por el centro comercial, viendo las tiendas, las mascotas, los niños tirándome, hasta que se acercó la hora de la función.

-Bien Ji, ya hay que ir otra vez al cine-.

-Ok, vamos-.

Ya estando en el cine compramos comida ...bueno ...él también compró todo y se ofreció para cargarlo todo. Entramos a ver la película y notamos que habían muchas parejas, algo extraño a mi parecer, ya que es una película infantil y no habían casi niños.

Mi más profundo deseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora