Por Gracie.
Desperté lentamente en una cama que no era la mía pero que yo ya bien conocía. Me estire un poco y note que todo estaba oscuro me gire y note que me encontraba sola en la habitación. Me estire para alcanzar la lámpara y la encendí. Cerré un poco los ojos hasta que estoy se acomodaron a la luz. Me incorpore y salí de la cama. Camine descalza hasta la puerta la cual estaba cerrada, la abrí en silencio. Todo el departamento estaba a oscuras a excepción de una tenue luz proveniente de la cocina. Camine con cuidado hasta llegar a la sala desde donde se podía observar la cocina. Allí estaba la única persona que podría encontrar. Tenía puesto el delantal de vacas que le había regalado la semana pasada y se veía muy concentrado. Amo verlo trabajar, las expresiones que toma cuando se concentra lo hacen ver tan tierno...
- Vas a acabarlo con la mirada- pego un grito al oír la ronca voz de Morgan junto a mí.
- ¡Joder! ¿qué demonios haces allí con la luz apagada?...mierda casi se me sale el corazón...- llevo mi mano al pecho tratando de regular mis palpitaciones. Morgan suelta una carcajada y enciende la luz.
- Quería observar la luna...- responde entre risas.
- Ja ja ja muy gracioso...- murmuro algo enojada y a la vez avergonzada. Siento el calor en mis mejillas. Mierda.
- ...al fin despertaste...- me rio.
- Si Spence...¿Por qué no me levantaste antes? Creo que he dormido todo el día... ¿qué hora es?- aun siento el calor en mis mejillas y trato de desviar la mirada. Morgan aun ríe por lo bajo lo cual no me ayuda.
- Te...veías cansada y...- evito mirarlo y solo siento como el color en mi rostro aumenta cada segundo. Morgan y su risa estúpida hacen que me sienta aún más incómoda.- son las...siete...- Spencer pasa su mirada de mi a Derek bastante confundido.- ¿está todo en...orden?- Morgan explota y sus carcajadas llenan todo el salón yo solo sonrió nerviosa y sé que no me pongo más roja porque ya no hay como. Spencer sigue sin entender pero se une a nuestras risas algo dudoso.
- Cocine algo de pasta. ¿les apetece?
- Ho sí, claro que si niño lindo...- el idiota de Morgan no lo superara nunca.
- Si por favor.- sonrió tierna. Spencer asiente y va a la cocina. - voy al baño.- digo antes de que Morgan inicie con sus bromas pesadas. Entro y observo la herida. Suspiro. Reviso la quemadura del abdomen y del muslo. Aplico la pomada que me receto el doctor y luego me pongo una venda sobre esta. Salgo del baño y me siento a cenar con los chicos. Hablamos de estupideces y reímos mucho. Al final la pasta que preparo Spence estaba deliciosa y no quedo nada pues los tres teníamos hambre, en especial yo.
- Delicioso...- dice el moreno- bien tortolos me iré para dejarlos a solas y que se puedan observar...- se ríe y me guiñe un ojo. Solo me sonrojo y rio. - adioooos. - Derek sale de la casa y nos quedamos solo Spencer y yo. Obviamente.
- ¿tienes que irte ya?- pregunta el genio algo... ¿triste?
- No...de hecho puedo quedarme... si el genio me lo permite...- lo miro agitando las pestañas.
- ¿segura?- me rio
- ¿enserio?
- ¿Qué hay de los C's?
- Les llamare les diré que llegare mañana...- el me fulmina con la mirada.
- Sabes que eres bienvenida.- sonrió y por segunda vez en todo el tiempo en que conozco a Spencer me pierdo en sus ojos. No quito la sonrisa solo dejo que su mirada penetre en lo más profundo de mi, aunque esta vez es distinto es...especial.
- ¿Spence?- digo algo ida.
- ¿sí?- responde de la misma manera
- Amo...verte a los ojos...- él se sonrojo pero no aparta la mirada. Sonríe abiertamente. Capital Cities interrumpe ese mágico momento cuando "Holiday" resuena por toda la sala. Busco el móvil y lo encuentro en uno de los bolsillos de mi maleta.
- ¿hola?
- ¡Gracie! joder nena, ¿Por qué no contestabas? ¡Te estábamos buscando por todas partes!
- ¿Brad?
- No que va tu abuela. Lo siento mal chiste. ¡si! ¡soy yo!
- ¿Qué paso? ¿Cuál es el escandalo?
- Mierda, es Celeste.- mi corazón se acelera al oír su nombre.
- ¿Qué le paso? ¿está bien?
- Bueno...si y no...estamos en el hospital
- ¿¡EN EL HOSPITAL!? ¿¡QUE DEMONIOS PASO!?-
- ¡Cálmate!- voy tomando mis cosas, mientras Spencer me ve interrogante. Pongo el alta voz.- Bueno sucede que Celeste estaba en clase de música o algo así y tuvieron que subir entonces una niña la empujo cuando iban de bajada y ella se cao y se estampo contra el pi
- ¡PARA AHÍ! Dime dónde están.
- En el hospital Victoria.
- Voy para allá.- cuelgo tomo las cosas y voy por mis zapatos. Spencer me sigue como un loco y comienza a arreglarse.
- ¿Qué haces?- le pregunto.
- No creas que te dejare ir sola.- sonrió algo aliviada por tener su apoyo sin necesidad de pedirlo. Salimos casi corriendo a pedir un taxi. Le doy las indicaciones al hombre y este nos lleva. Al llegar corro como loca hasta la recepción.
- ¿Celeste Lewis?-pregunto agitada.
- Piso 7, habitación 202.
- Gracias.- corro al ascensor con Spencer pisándome los talones. Nos metemos en el. Al llegar corro nuevamente sin dirección.
- ¡GRACIE!¡ES HACIA EL OTRO LADO!- me grita Spencer. Freno en seco y corro en dirección contraria.
- ¡COLIN!- corro hacia donde se halla mi hermano de corazón.
- ¡Gracie! qué bueno que lle ¿Qué demonios te paso en la frente? - me dice genuinamente sorprendido.
- Larga historia. ¿como esta? ¿Qué le paso?
- Se fracturo el tabique.
- Joder y ¿como esta?
- Tuvieron que llevarla a operación aún no ha salido. ho disculpa Spencer no te vi. Gracias por venir.
- Descuida.- susurra. Mi preocupación es bastante notoria me siento junto a Colin y junto a mí se sienta Spencer.
- ¿Y Brad?
- Allí.- señala al rubio que viene caminando por el pasillo con una botella de agua en la mano.
- Hola bonita.- me dice triste.- ¿com..qué demonios te paso ahí?
- No es nada estoy bien. - ellos no insisten solo nos sentamos en silencio a esperar que Celeste salga.
***
¡Hola!
3/3
Bueno este es el fin de la #mini-maratón.
espero que les haya gustado y muy pronto espero leerlas pronto.
Gracias por todo su apoyo.
Las quiero.
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Just You, Spencer Reid. ( Editando )
FanfictionGracie Hathaway es una temperamental chica, próxima a cumplir los 25 años de edad. Es una mujer fuerte y segura de sí misma, alta, delgada, musculosa, con unos bellos ojos verdes y una tez blanca como la leche. Aunque Gracie es muy hermosa, la vida...