Despertarse por los rayos de sol que se filtran por tu ventana seria un buen despertar, un despertar sin escuchar tu odiosa alarma hacer un ruido infernante.
Considerando que nos despiertan a las ocho de la mañana en este internado, en medio de la nada, me visto con lo primero que encuentro en mi armario, ya que se me hace tarde.
No voy temprano por temor a que la directora no me encuentre allí y me castigue, sino por compromiso con mi mejor amiga.
Después de vestirme con mi short y musculosa negra, salgo de mi habitación.
No soy gótica, sólo que no me empeño en vestirme como las demás chicas del internado. No me molesto ni en peinarme siquiera.
Para algunas personas que me conocen sonará un poco raro que yo tenga una amiga, y rubia, pero hemos decidido amarnos con todos nuestros defectos, y mira que son muchos.
- Fíjate por donde caminas.- murmuro viendo al idiota recoger sus libros del suelo.
- Lo siento.- escupe en el momento que se encuentra frente a mí.
Ruedo mis ojos y por un milisegundo siento pena por el chico que ahora me está dando la espalda para largarse.
Sus lentes de pasta y sus pantalones holgados de seguro no atraen a ninguna chica.
En el momento que logro ver la hora, abro mis ojos de par en par comenzando a correr hacia la habitación de Katherine, mi mejor amiga.
-Alexander, no se tu segundo nombre, Collins, ¿Te parece que estas son horas de llegar?- Pregunta la rubia apuntando a su reloj de mano.
- ¡No arranques mi cabeza!- digo cubriendo mi cabeza con mis brazos.
- Pues... No puedo hacerlo, si lo hago me quedo sin amiga, ahora vamos, estúpida- dice agarrando mi brazo y sacándome de su habitación.
- ¡Oye! No soy estúpida.- Exclamo.
- Claro que si- dice Katy riendo.
Cuando logramos llegar a la cafetería, sin decirnos absolutamente nada, yo camino hacia la mesa de siempre mientras que ella se dirige hacia el bufete para retirar nuestro desayuno.
La cafetería parece Hogwarts con todos los estudiantes comiendo y hablando a la vez, ¿Como hacen para hablar con la comida en la boca sin escupir?
- Ya traje los desayunos- Avisa Katy poniendo unas bandejas azules con comida, sobre la mesa.
- Por fin, diez años luz en traer un desayuno a tu mejor amiga- Digo suspirando.
-Solo fueron cinco minutos, exagerada- se sienta a mi lado y comienza a hablar.
Katherine nunca pierde la oportunidad de hablar de su compañero de habitación, Jimy, en ocasiones como estas doy gracias a Dios no tener un compañero de habitación.
El internado insiste en que tenemos que aprender a convivir con personas del sexo contrario.
Suficiente con verlos todos los días.
Siempre escucho lo mismo del pobre Jimy. Según mi amiga se comporta como un completo idiota, que siempre es un desastre, que deja la ropa tirada por todos lados y que ya esta harta de él, está a punto de dormir conmigo, en la cama de al lado. Obviamente la convencí de que ya se acostumbraría al comportamiento de Jimy, y que algún día iba a cambiar.
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Enamorada De Un Idiota [1]
Novela JuvenilElla es Alex Collins; sarcástica, divertida y un poco problemática. Él es Jason Denovan; egocéntrico, sarcástico y mujeriego. Ellos son un problema, un problema que al juntarse se multiplica. Eso no les importa. Se odian mutuamente pero... dicen q...