¿Confusión o Aceptación? ✧SasuNaru✧

✧Un Día Muy Extraño✧

Naruto despertó con un dolor de estómago, comer tantos dulces no fue buena idea. Ya puede escuchar a Iruka-sensei decirle; "te dije que no comieras tantos dulces, yo ya sabía que te doleria el estómago. ¡Ah! Pero el joven nunca me escucha blah blah blah" el modo materno de Iruka le daba risa al oji-azul.

Para su buena suerte era sábado, no tendría que ir a la escuela con su cara de;"alguien mateme por favor" aunque ya sabe quién sería el primero en la fila para hacerlo... El teme de Sasuke.

No sabe porque las grandes ansias de que el le llame amigo. Así es, ni siquiera el rubio sabía porque quiere ser llamado así por Sasuke, algo lo impulso a hablarle, estar a lado del teme-por más amargado que sea-lo hacia sentir alegre. Una alegría que murió junto a sus padres...

Claro, Naruto es muy alegre y se le nota a kilómetros de distancia, pero una parte importante de aquella alegría no estaba, hasta que el amargado de Sasuke llegó.

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Mientras tanto en la residencia Uchiha...

-¿como que no alcanzarán a llegar?- cuestiona Itachi.

-tenemos una junta muy importante...- contesta la voz de Fugaku, padre de los hermanos Uchiha. Sasuke llega y le arrebata el teléfono a su hermano mayor.

-¿y festejar el cumpleaños de mamá no es importante?- pregunta el menor con enojo.

-cariño, lo siento, no podré estar...- está vez fue Mikoto, su madre.

-¿saben que?- interrumpe-No importa, es lo mismo todos los años... Adiós.- cuelga Sasuke para dirigirse a su cuarto, descargado todo su enojo en la pobre puerta.

"toc, toc" tocan la puerta recién golpeada.

-¿que quieres Itachi?- pregunta Sasuke sin abrir la puerta.

-quiero hablar- contesta mayor.

-yo no- dice de manera cortante.

-Sasuke, se que mamá y papá todo el tiempo trabajan pero...- antes de decir otra palabra Sasuke abre la puerta.

-¡es injusto que siempre estén trabajando! ¡es lo mismo todos los años! ¡nunca están para celebrar nada!- grita descargado toda su furia.

Itachi sólo se quedó estático, le sorprendió la actitud de su hermano.

Sasuke no era un malcriado, ni un egosentrico, al contrario, agradecia lo que sus padres le daban, pero un hijo no sólo se satisface sólo con lujos.

El mayor no sabía que hacer, sabía que su hermano menor tenía la razón, pues sus padres no pasaban tiempo con ellos desde que Sasuke tenía siete años. Lo único que llegó a su mente fue darle un abrazo.

Sin pensarlo dos veces abrazo a Sasuke.
Estaba esperando una respuesta negativa a su acción, como por ejemplo un golpe, un grito o una mordida...

Ninguna de ellas llegó, se sorprendió más de lo que estaba al sentir como el menor le correspondía el abrazo aferrandose a su polera.

Sabía que Sasuke se sentía muy mal, el menor tiende a tener una personalidad orgullosa, haciéndolo tener ese mal humor de indiferencia. Pero ese orgullo sólo se rompía cuando realmente se sentía mal y necesitaba de alguien y con la ausencia de sus padres el único que le quedaba era Itachi.
Tenía que hacer olvidar esto a su hermanito.

-oye otouto...- llama la atención el pelilargo.

-¿que pasa?- pregunta Sasuke sin soltarse del abrazo.