Casi nos besamos, casi ocurre, casi... Me sorprendió la habilidad de que mi cerebro actuara más rápido que mis labios.
Era algo inevitable, su rostro estaba a centímetros del mío, sus labios a segundos de ser chocados por los míos.
Me alejé de el para evitar lo que sería uno de los momentos más hermosos para mí.
-Mi madre debe estar preocupada, Te escribo dentro de unas horas. -Dije alejándome de él.
-Esperare tu mensaje, Scarlettina.
-No me llames así.
-Eres tan necia...
-Tú me haces necia.
Y ahí fue cuando sucedió, cuando el mundo dejó de hacer todo lo que estaba haciendo, cuando el tiempo se detuvo por un microsegundo... Fue ahí justamente a las cinco y cincuenta de la mañana cuando él soltó un gran y leve...
-Te quiero.
Fue más como un susurro, pero con un gran poder que puso a más de cuatro mariposas a revolotear por todo mi estómago.
Cerré la puerta de su auto y caminé hacia la puerta de mi casa. Todo parecía normal, no había señal de que alguien estuviera despierto, muy sospechoso.
-Dónde estabas Scarlett, nos tenías preocupados.
-Hola mamá, disculpa, salí a tomar un poco de aire.
-Tus hermanos y yo te buscamos en todos lados de la casa, a fuera y adentro, no me vengas con patrañas.
-Estaba en casa de Hanna, estudiando.
-Llamamos a casa de Hanna y nos dijo su madre que tú no te encontrabas con ella.
-Ok, ok estaba en el instituto buscando mi libreta de inglés, tengo un parcial hoy y no he estudiado nada. -Era malísima mintiendo, mis ademanes lo demostraban todo.
-Hablas de este cuaderno, ¿querida hermanita? -Comentó alardeando mi hermano Jake.
-Dije ¿inglés? Era literatura... Que mal estoy. -Añadí con una risa más falsa que las boobies de la Profesora Sasha.
-Scarlett... -Comentó mi madre.
-Está bien, esta bien era biología, en realidad no he estudiado nada y reprobaría si no estudiara. Además Mamá crees que hoy me permitirías dejarme en esta humilde casa.
-Algo malo debes haber hecho para no querer ir al colegio hoy. Por hoy te dejaré.
-¡Gracias mamá, Gracias! -Dije como una foca retrasada.
Después de eso, subí a mi habitación me quite las converses's que llevaba puestas, mi sueter rojo y mis vaqueros azules. Caminé hacia al baño y empecé a ducharme, el agua recorría todo mi cuerpo. Tomé el jabón y me lo pasé por todo el cuerpo. Mientras pensaba sobre Jerome, ese chico que estaba creando otra parte de mí, el amor... La chica cursi y además de cursi, enamorada.
Salí del baño, solamente pensando en él, me tiré en mi cama para descansar algo, pero no pasar por alto a Jerome.
-Hey, ¿adivina quién se quedó en casa hoy y no hará el parcial de biología? :-D -Hace un minuto.
-¿Quién? -Hace un segundo.
-Yo, jaja. -Hace dos minutos.
-Que suertuda, Mi scarletina, cuídate.- Hace un minuto.
"Mi Scarlettina", lo leí con su voz una y otra vez, sin parar.
Este sentimiento, estaba volviendo a mí. Y no lo podía evitar, podía decir que me estaba...
Enamorando. Enamorando de mi próximo hermanastro...
Nota de la autora: Disculpen por este capítulo tan corto, pero ya había escrito uno y lo borré por error, sin rastro de ese capítulo. Pero aquí está con un poco de tardanza "Renegados". Si Dios permite subo el próximo el martes o quizás mañana. Espero que hayan disfrutado el capítulo.
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Mi plan no era Enamorarme.
RomanceSoy la chica mala de la familia o sea la oveja negra. Además, no soy la hija que sus padres comparan con otros chicos destacando sus virtudes sino lo contrario. Mis padres se separaron cuando yo tenía seis años de edad, desde entonces vivo con m...