Amigos

8 0 0
                                    

En la noche como éramos apenas dos en esas habitaciones para más 15 solados, intente empezar una conversación con la chica, -Hola, soy Cheryl -, ella contesto tímidamente, -Yo soy Kay, un placer conocerte-, le preguntes porque se había enlistado, me conto que en su familia era como una tradición entrar al servicio militar, y por ser mujer no podía evitar el deber que tenía con su familia , pasamos horas conversando cuando ella pregunto porque me enliste solo guarde silencio, después de una pausa respondí que no quería hablar de eso, para evitar ese tema yo le pregunte qué era lo más loco que había hecho me conto que cuando tenía 12 años ella con su primo habían colocado una rana en el escritorio de su tía, pasamos riéndonos horas contándonos historias graciosas y así nos convertimos en amigas, así nació mi amistad con Kay Kraser se volvió una de mis mejores amigas, a la mañana siguiente nos levantan a las cinco de la mañana para un calentamiento y también nos hicieron correr por todo el regimiento, después de desayunamos juntas. Cuando empezó el entrenamiento, el sargento que estaba a cargo empezó a asignar compañeros de entrenamiento, él me asigno a Bastian McAbee como compañero de entrenamiento , cuando el sargento nos explica cómo debemos concentrar la energía para lograr controlar el viento, entonces empiezan a darnos las instrucciones nos indican que primero debemos despejar la mente de que ninguno pensamiento ocupe nuestra mente, pero nunca he podido borrar el momento en el que vi a mi madre ser apuñalada por la espada y después verla tirada en el suelo sin vida, cuando no pienso en nada esa imagen ocupa mi mente. Él me observa al intentarme concentrarme, e intentaba hablar conmigo pero él se retractaba, yo intentaba pero no lo lograba realizar el ejercicio, algunos instructores pasaban para revisar el si logramos hacerlo para empezar con praguras que puedan ocupar en batalla, Bastian nota que no logro hacerla me dijo que lo mire y que piense en un espiral, que piense en las olas del mar, las he visto un par de veces, poso mis ojos en sus ojos de son azules como el mar, sin darme cuenta noto cómo se forma con el viento, mientras lo hago el Mayor BerryCloth me observo y me califico, después que el mayor se fuera, le agradecí a Bastian me dijo que lo haría por cualquiera.

Él noto una sensación de vacío en mi mirada, se dio cuenta que en mi hay una parte oscura que guarda tristeza y dolor, también noto que soy fría con respeto a otros, pero él había ofrecido su amistad quebrantado la barrera que tengo hacia al resto del mundo, se lo presente a Kay, desde el inicio se llevaron muy bien.

En la clase de combate nos dieron a escoger varias armas Bastian escogió un arco, Kay escogió un katar mientras que yo escogí la espada, cada uno nos indicaron como eran las posiciones de combate, a cada uno nos daban diferentes instrucciones, las que me dieron a mi fueron como debía agarrar la espada primero nos dieron las forma en cómo se empuña o se clava una espada, pasaron los años pulí mis habilidades controlando el viento y el agua pero sin duda mi mejor fuerte es la espada, desarrolle una técnica impecable para matar a una persona en un movimiento , durante las clases de control del agua fueron las chistosas e interesantes clases ya que era el sargento que nos enseñaba la posición , los movimientos de las manos, estos instantes eran los pequeños momentos del día en los que sonreía, Kay y Bastian son las únicas personas que despiertan emociones o me recuerdan que soy simplemente una asesina a sangre fría.

Un día Kay y Bastian notaron que a veces no presento humanidad cuando se trata de manejar la espada, había momentos en las veces que estamos en los entrenamientos imaginaba que el muñeco de entrenamiento era el general que mato a mi madre lo destruí sin piedad, tuvieron que detenerme porque en batalla significaría la muerte pero Kay y Bastian notaron que por alguna razón soy una persona que puede matar a sangre fría ,preguntaron porque algo, así les conté que imagine que el maniquí fue el asesino de mi madre que odio tanto a los maliks, porque lo que le hicieron a mis padres, mientras se los contaba un par de lagrimas corrían por mis mejillas y les mostré el collar y el anillo que es lo único que me queda de mis padres; entendieron porque he sido fría y no dejo que sentían mis emociones y pero ellos saben que se ha convertido en mi familia que quebrantan mis barreras hacia los demás.

InfraterraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora