Solo héroes (Terminada)

La simple vida

Comienzo del instituto el rubio el cual tenia mechones de castaño oscuro, se dirigía en transporte publico denominado subte un lugar tranquilo asta que este Genos es acosado por unos Bravucones que lo tocaban se dejo debido a que no quería llamar la atención de nadie

De repente un peli-negro apareció frente a este para protegerlo golpeándole no tenia bastante fuerza pero no aceptaba que la maldad reine y menos con el presente, luego de que estos escaparan, nota que este estaba algo agitado y tembloroso

-¿Hola? ¿Estas bien?

-Si, lo estoy

-No lo pareces, ¿no quieres sentarte?

-No, gracias

-Vamos no seas tímido

-Lo siento

Fueron al instituto callados, no hablaban solo que el rubio estaba mas relajado de lo que antes estaba, solo que evitaba contacto con el peli-negro debido a que no quería molestarlo, se levanto del asiento y le hace una referencia para irse

-Aquí también bajo

-entiendo

Salio del transporte para comenzar a caminar, no le debía dar importancia que el contrario también continuaba caminando tras suyo, el día estaba tranquilo en la ciudad el clima templado no daba señal de que fuera a llover, pero mas allá de eso tenia examen hoy

-Hey, ¿cuantos años tienes?

-catorce

-Eres muy joven

-No diga eso ¿y usted cuanto tiene?

-veinte, pero creí que tenias mas

-Entiendo,¿para que va al instituto?

-Porque debo ir

De nuevo el silencio cuando llegaron ala puerta del edificio se alejaron cada uno a su rumbo sin saludarse no era apropiado hacerlo ya que no son nada, solo sabían su edad, y que no se habían a llevar para nada, no tenían las mismas preferencias debido ala gran diferencia de edad

El día en el instituto impuso tranquilo, solo que aburrido para el rubio ya que quería irse de ese lugar ya sabia varias cosas de la clase solo miro por la ventana dando se cuenta que allí estaba haciendo gimnasia sin darse cuenta se había quedado un buen rato mirándolo no sabia que le llamaba la atención pero allí estaba mirando cada acción que el peli-negro realizaba

-Presta atención

-Lo siento

Empezó a realizar los cálculos asta que al fin toca la campana para avisar el comienzo del receso fue subiendo las escaleras que dirigían directo a la azotea para calmarse además de que no le agradaba estar con una gran multitud, empezó a comer su Bento completamente relajado

-¿Otra vez tu?

-Si, ¿Que hace aquí?

-Siempre vengo aquí

-Ya veo

-Aun sigues mal por lo que paso?

-¿Usted esta preocupado por mi?

-Si no quieres hablar no importa

El viento soplaba volando las flores de cerezo se había percatado el jovencito que se había enamorado de su salvador, debía calmarse para no levantar sospechas debía pensar claramente que el contrario le llevaba 6 año y además de eso es un hombre

-¿Me das un poco?

-Esta bien, tome

-No quiero todo -riendo bajo-