Estúpida Soledad (yaoi) [PAUSADA]

Cap 9. Sólo Un Día Más

Anteriormente...

Después de terminar de comer, el pecoso de fue a cambiar, mientras que yo me quede afuera esperándolo, y recordé de repente lo ocurrido ayer en el bosque, mi golpe ya estaba mejor, pero el golpe en la cabeza... Qué fue esa escena?... Habrá sido un recuerdo?... Al igual que la otra noche?...
El pecoso salió de la casa e interrumpió mis pensamientos cuando me dijo que subiera a su camioneta *sigo sin confiar en esa chatarra...*

Después de pasar con Hugo para recoger el cargamento fuimos a dejar una parte con el señor Tom.

-. Buenas tardes señor Tom - dijo sonriente el pecoso-. Aquí está su parte.

-. Oh cierto! Toma la parte correspondiente del otro día y llevaselo a tu tía. -respondió-. De seguro se puso histérica.

-. See... Será mejor que pase a dejárselo de una vez -dijo el pecoso mientras regresaba a su camioneta y yo lo observaba junto con Tom-

-. Y cómo va todo Lucas? -me preguntó inesperadamente-. Ya recuperaste algo?

-. Ehm... Pues... No en realidad...

-. Jhm -gruño algo molesto, por alguna razón siento que no le caigo bien al señor Tom-. Sigo creyendo que te he visto en alguna parte... -me miraba serio-...Pero no se de donde... Y eso me molesta.

-. Luck! -interrumpió el pecoso-. Ya vamonos!... Adiós señor Tom!

Subí a la camioneta, y sin despedirme, nos fuimos asía la carretera

-. De qué hablabas con Tom?...

-. Me preguntó si ya recuperé algo... Y menciono algo sobre haberme visto antes y cosas así... Es extraño...

-. Jaja, así es el señor Tom, pero es buena persona.

Después de un rato conduciendo por la carretera, llegamos a la casa de la tía Susan para entregarle su parte.

-. Muchas gracias mis niños -dijo sonriendo-. Quieren llevarse la comida o comen aquí?

-. No la llevamos tía - respondió-. Todavía nos falta una entrega más por hacer.

-. Oh... A la montaña minera del norte?...

-. Si... Luck irá conmigo!... -dijo más tranquilo-

-. Está bien, pero tengan mucho cuidado por ese camino...

-. Si tía...

Yo solo me quede algo preocupado... Qué pasa en ese camino?... Hay algo peligro?... Es tan malo como para que mi loco conductor le tenga pavor?... Esto me dejo angustiado.
Nos despedimos de la tía Susan y subimos a la "máquina de la muerte" que me preocupaba más...

-. Qué tienes?... -tomé de la mano al pecoso, que se veía más pálido de lo normal pero inmediatamente tomo un color rojo-

-. E-estoy bien... -se aferro un poco a mi mano-. Es solo que... No me gusta pasar por ahí...

-. Por?...

-. Porque por ese camino fue por donde mis padres perdieron el control de auto y murieron...

Al escuchar eso, mis ojos se abrieron como platos y mi corazón se detuvo por un momento.
Sin soltar su mano me acerque a él y lo abracé.

-. Todo estará bien... Tranquilo... Yo estaré contigo -dije lo último inconscientemente, haciendo que el pecoso se sonrojara más.

-. Ehm... S-si...

Solté al pecoso y éste encendió la camioneta.
Condujo unos cinco kilómetros más adelante por la carretera hasta llegar a un camino entre los arboles, adentrándose a el *Deja bu*.
El pecoso parecía bastante nervioso.

-. Te sientes mal?...

-. No... -me respondió mientras suspiraba profundamente-... Ya estoy acostumbrado a esto... Lo hago cada dos meses -me sonrió algo inseguro, a lo que yo me di cuenta-

-. Está bien... Pero por si acaso -me acerque al asiento de en medio al lado de él-

-. Y eso para qué? -soltó una tierna risita-

-. Para asegurarme que tu chatarra no valla a intentar sacarme a medio camino...

-. Jamás haría algo así -dijo riendo-

-. Tú no, pero tu carcacha lleva tiempo mirándome con ganas de abandonarme.

-. Jajajaja, pues si les sigues diciendo así tal vez lo haga...

Lo logre, el pecoso se calmó un poco y siguió conduciendo por ese camino tan estrecho, que en poco tiempo me hizo estremecer al llegar a un camino aún más estrecho, no había nada que lo separa del borde y por abajo solo se veía una densa niebla, teníamos que ir con mucho cuidado pegados a la "pared", y más a parte estaba de subida...

-. Oye... Creó que me hubiera gustado que tu chatarra me abandonara a medio camino... -el pecoso agachó la mirada un poco triste-. Mh... Aunque prefiero venir contigo -se sonrojó y me dedico una linda sonrisa-

El pecoso con mucho cuidado avanzó por aquel rumbo tan peligroso, y yo solo deseaba que nada fuera a pasar.
Por suerte, solo nos tomo diez minutos llegar hasta arriba.
Cuando llegamos, el pecoso se estaciono frente a una mina algo tenebrosa; bajo la carga junto con mi ayuda y nos acercamos.

-. Oye... Hay alguien aquí por lo menos?... Esto se ve abandonado...

-. Sí... Esta mina es en la cual se trabaja más, es la que más recursos da, por eso trabajan sin parar... -dejo las cajas en el suelo-. Pero también en la más peligrosa, por eso prefiero venir solo cada cierto tiempo...

-. Ya veo...

-. Ginny!!! -gritó sacándome un susto-

De pronto la sombra de una mujer apareció desde adentro, para después mostrar a su respectiva dueña.

-. Hola cariño! -lo abrazó-. Gracias por venir hasta acá.

-. No hay problema...

-. *Qué no hay problema?! Estas loco?!* Hola señora Ginny...

-. Hola cielo! -fue y me abrazó también- No creí que fueras a venir también, gracias por ayudar a nuestro lindo niño.

-. Tía Ginny... -dijo avergonzado el pecoso-

-. Es un placer - respondí-. Me gusta acompañar al pecoso, es muy tierno su niño -voltee a ver al pecoso, el cual estaba colorado-

-. Oigan! Basta los dos... -dijo tiernamente el pecoso-

Después de entregar todo, nos despedimos de la señora Ginny y nos fuimos.

-. No sabía que ella también trabaja en esta mina...

-. Ella es la dueña... Gracias a eso, el señor Tom y ella se conocieron, y ahora son los dueños más reconocidos de la mineria por aquí...

-. Tus padres trabajaban para ellos?...

-. No... Mis padres, junto con ellos, eran los "reyes de la mineria" pero ocurrió el accidente y... Bueno, eso..

-. Oh...

Después de recorrer el camino de regreso, llegamos a la casa muy cansados.

Narra Daniel
Cuando llegamos, yo me metí a bañar mientras que Luck calentaba la cena, no pudimos comer y veníamos muy hambrientos.

Después de cenar, Luck se metió a bañar y yo lave los platos, leí un rato y me fui a acostar, quise esperarlo, pero mis párpados comenzaban a pesar, entonces, caí en sueño...

Continuará...