Ningun hijo tuyo sentara cabeza con mi hija

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Annabeth estaba desmayada frente a mi, ¡por el Hades! ¿¿Tan inesperada había sido mi proposición?? La tome en brazos para llevarla directo a la enfermería con la ayuda de Will Solange cuando una voz rompió el silencio que se había hecho en el campamento - PERSEUS JACKSON POR ULTIMA VEZ, ALÉJATE DE MI HIJA - oh-oh esto no esta nada bien ¿qué acaso esa Diosa no entendía lo mucho que amaba a su hija? ¿tanto me odiaba? Antes de que alguien pudiera mover un dedo Clarisse le grito a la Diosa que se había materializado en medio de todos - señora ¿no cree que ya es tiempo de que deje a su hija ser feliz? - vaya Clarisse si que tenía agallas - ¿quién te crees que eres para hablarme así hija de Ares? - preguntó Atenea antes de hacer volar a medio campamento por los aires y un momento después unas 15 o 20 voces gritaron al unísono - ¡No te atrevas a tocar a mi hijo! - El mundo se volvió loco ¿cierto? La verdad en este momento parecía poco improbable. Ahora resulta que con una proposición bastaba para que todos los dioses estuvieran "preocupados" por sus hijos. La mayoría de los semidioses parecían pensar lo mismo ya que miraba a sus padre extrañados y claramente irritados - Claro que no hijo mío- oh no esa voz, mi papá también estaba aquí- Yo estoy aqui para decirte que estoy muy orgulloso de que al fin hayas pensado en sentar cabeza- me contestó mientras Atenea le miraba con odio - ¡ NINGÚN HIJO TUYO SENTARA CABEZA CON MI HIJA ! - ¡Atenea querida... - Poseídon por favor permíteme a mi encargarme de la situación- le interrumpió nada más y nada menos que Afrodita mientras me miraba con compasión - ¿por qué no dejas que Annabeth decida? Al fin es a ella a quien le preguntaron. - Yo solo pude observar como Annabeth despertaba entre mis brazos para acto seguido sonrojarse hasta la médula.- Hola Annabeth- dijo su madre con una voz cargada de ternura- ¿ma... Mamá? - preguntó Annabeth mientras se bajaba de mis brazos, luego pareció darse cuenta del público Olímpico que nos rodeaba y bajo la vista al suelo - Annabeth querida serias capaz de decirle a Percy tu respuesta- preguntó Afrodita con una sonrisa de autosuficiencia - yo solo observaba a Annabeth y entonces mi peor pesadilla se hizo realidad - Percy, lo... Lo lamento pero No - dijo para después salir corriendo hacia su cabaña - Te lo dije Peseus, ahora si me permiten tengo cosas que hacer - no se decir quien estaba más conmocionado si el resto del campamento, los dioses o yo, varias semidiosas lloraban algo sobre el fin de Percabeth, mientras algunos otros se preguntaban si mi ego estaría lástimado, y varios dioses me miraban con pena pero cierta diosa del amor lloraba desconsoladamente al igual que sus hijas e hijos a un lado de ella sin pensarlo dos veces salí corriendo hacia la cabaña de Atenea pero alguien se lo impidió mejor dicho su padre - Percy, no es culpa de Annabeth... oh oh ¿estas llorando? - ¿Y tu que harías? - respondí mientras le miraba con ojos llorosos.

¿Tampoco soy tu tipo? TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora