El elegido.

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Pero si esto ya paso ¿cuánto más ha pasado entonces?

Han pasado tantas cosas que tú ni siquiera te imaginas, ella sufre en silencio, se podría decir Draco que ella no diría nada solo para protegerte.

¿Qué insinúas?

Continua, y descúbrelo por ti mismo.

¿Qué más veré?

Sigue caminando hacia la puerta del frente.

¿Porque me muestras todo esto?

Solo quiero que veas cuánto daño haces y te des cuenta que no somos tan diferentes.

No creo que seamos iguales, ya que tú matarías por tu propia conveniencia.

¿Y tú que no lo harías? después de todo haces sufrir a una persona.

Ella no me ah dicho nada, ella confía en mí.

Idiota, ella no diría nada, ella te... bueno ya! Entra a la maldita puerta.

Como digas.-camine hacia la puerta, mi mano temblorosa toco la perilla muy fría, al abrirla di un paso al interior de esta y me pude observar a mí con Luz.

Estaba Luz en la biblioteca sentada leyendo un libro, camine hacia ella y me senté en una silla frente a ella y me pude ver a mi mismo acercándome a ella con una sonrisa, mientras que ella leyendo su libro, reflejaba una cara de tristeza.

-¿Luz a que no adivinas?

-Ya sé que vas a salir con Pansy.

-¿Como lo supiste Luz?

-Pansy lo anda gritando por todo Hogwarts.

-Debí suponerlo.

Ella cerró su libro y dijo:

-No entiendo porque sales con esa chica.

-Bueno porque Luz ella es: guapa, popular al igual que yo, además de que Pansy viene de una gran familia.

-Oh claro

-Luz que tienes, te noto diferente.-Idiota, ósea yo mismo porque dije eso? Es obvio que ella esta triste ¿como no lo note?

-No me sucede nada, solo que... sabes que tienes una cita con Pansy y se te hace tarde.

-Luz no me cambies el tema! ¿Que tienes?

-Ya Draco estoy ocupada y tengo un examen mañana, tu ve a tu cita con Pansy.

-Ok Luz sí que estas diferente.-Como no iba a estar diferente, si le restregué en la cara la cita, soy un idiota.

-Bien Luz veo que no te agrada mi presencia, así que me iré.

-Ya Draco deja de exagerar, adiós.

-No me dirás que me quieres o me desearas suerte?

-Draco ya! Vete, lárgate.-Vi como me iba sin decirle nada, en su mirada vi tristeza y rencor? Ella se levanto de su silla tan triste casi llorando y se fue a donde iba, yo la seguí hasta su dormitorio, pude observar cómo se acostó en su cama y su libro quedo en el suelo, me senté a su lado, como me hubiera encantado no haberla déjalo sola y quedarme a su lado, de sus ojos salían lagrimas y empapaban sus mejillas.

-Lucius ya! No quiero seguir viendo esto

-Aun no has entendido

-Que quieres que entienda que la eh hecho sufrir, pues si, si entiendo ¿que puedo hacer?

-Ya no puedes hacer nada Draco, esas solo son imágenes del pasado que ya nunca podrás cambiar

-Lo entiendo.

-Acompáñame Draco

-A donde

-A mi escritorio ¿no confías en mi? Después de todo soy tu padre

-No confío ni en tu sombra.-Camine detrás de él y me llevo hasta su escritorio y se sentó cómodamente en su silla.

-Vamos Draco siéntate ¿no quieres algo de tomar?

-No... ¿qué es ese libro?

-Sabía que eras muy curioso, pero no tanto

-Solo dime ¿qué es ese libro?

-En este libro encontraras, las respuestas de todas tus preguntas

-¿Como hago para salir de este sueño?

-Draco esto ya no se trata de un simple sueño, es la realidad de una verdad.

-La realidad?

-Si Draco la realidad, de lo que ha sucedido a tu alrededor por años y tú no te has dado cuenta.

-Como digas... pero este libro está en blanco, que pretendes? Como este maldito libro puede responder mis preguntas?

-Sabes qué? Ya me canse de ti...

Todo empieza a nublarse, mientras Draco despertaba de su largo y oscuro sueño, despertó sudando frio y deseando que nunca le hubiera hecho daño a Luz y que lo que le dijo su padre no fuera verdad.

-Todo esto no puede ser verdad, donde esta ese maldito libro... oh allí estas.- Me levante y camine, el suelo estaba frio, tome el libro y lo coloque en el escritorio y se mente en una silla, tome una pluma y la moje con tinta y escribí lo siguiente:

¿Como hago para que Luz no sufra?

Enamorándote de ella

¿Cómo lo hago?

Siendo el elegido...

Basta de ser invisible para élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora