Me fuí a casa a ducharme para ir a una cena con los colegas. Mi abuela me había venido a ver!!!! Me puse muy contento, ya que es mi yaya preferida. Le dije que me tenia que ir porque tenia prisa. Bueno recapitulando me duché y me vestí elegante para la cena con los colegas, pero los de verdad. Nos reunimos a las 21, en el restaurante Zarzamora, entramos pero falta Marco. Él no vino. Nos sentamos en nuestra mesa y nos vino la camarera a que no os creéis quien era la camarera que nos tocó, era Mireia, la chulada de chica que se apuntó hace poco en el gimnasio. Ella acerco para pedirme el plato pero yo estaba perdido en su cálida y refrescante mirada. Me reconoció y me dijo:
-Hola Bruno, soy Mireia que me apunté hace poco a tu gimnasio.
Me estaba muriendo por dentro pero con cordura le dije.
-A sí, encantado de verte. mira me gustaría tomar una Fanta de limón y una hamburguesa de piña, queso y rodajas de tomate.
-Querrás postre??
-Sí, un brownie con helado de macadàmia.
Se fue a passar el pedido a los cocineros. Su ausencia me fue infinita, es lo que pasa cuando estas colgado de alguien, no???
Me lo trajo y me sonrió de oreja a oreja.
Cuando me fuí iba un poco más alegre de lo normal, supongo que me pase con la Fanta.