Capitulo 2: ¿Anillo?

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Justin......

—    Justin, eso que has dicho en la reunión ¿es eso cierto? —pregunto mi abuela algo preocupada.

—    Esta vez será cierto, Hailey va a volver a Nueva York —respondí con una sonrisa en mis labios.

—    Hailey volverá a Nueva York, qué alegría —espetó mi abuela—. Hailey dejará de modelar?

—    Ella lo dejara —conteste alegremente.

—    ¡¿Porque dices tan buenas noticias hasta ahorita!? —se quejó dándome un fuerte golpe en el brazo.

—    Es porque estoy muy feliz —respondí con una carcajada y enseguida abrace a mi abuela.

—    Por si acaso —interrumpió dan—. Si ella no acepta la propuesta, ¿Qué pasaría?

—    Por qué dices algo tan negativo cuando me estoy preparando para un evento por única vez en mi vida —manifesté con algo de duda en mi interior.

—    Lo siento Justin — murmuró dan—. Por cierto no necesitas que te acompañe al centro comercial?

—    No, gracias —respondi—. Escogeré el anillo por mi cuenta con mucho cuidado. Dan por favor quédate aquí y prepara las cosas de las cuales te hable sin ningún error.

Me despedí de mi abuela y fui directamente al coche, este día sería especial ya que compraría el anillo perfecto para Hailey.



"_____________"



Salí de mi trabajo por un momento, tenía que ir por el encargo de mi jefe el cual era importante, a quien engaño comprar dulces no es nada importante en fin llegue a la tienda sin ningún contratiempo.

El centro comercial tenía una convención de perros, a mí me gustan los perros, bueno en realidad solo los pequeños ya que de niña tuve un mal momento con un perro grande. De igual manera no pasare cerca de ellos ya que la tienda está un poco lejos de la convención. Me detengo en una joyería para apreciar los anillos de boda, son tan hermosos en ese momento la empleada toma los anillos y solo pienso que debe de ser genial y quién podría ser esa suertuda, salgo de mis pensamientos y voy directo a la tienda de dulces.

Por fin entro a la tienda y el lugar es tan colorido, dulces por todos lados un niño se volvería loco en este lugar. La empleada de da cuenta de mi presencia y me recibe con un " princesa, le damos la bienvenida por haber llegado a la casa mágica de dulces, si necesita ayuda llámenos en cualquier momento" sonrío y murmuró " no soy una princesa" voy directo a los dulces, cientos y cientos de dulces.

Tomo los necesarios y me dirijo a la caja, la empleada me muestra una paletas en forma de corazón y comenta "princesa, estos son los dulces love-love que te ayudarán a alcanzar tu amor, como compro mucho de parte de la tienda le daremos love-love de regalo" pago y le doy las gracias a la empleada.

Salgo de la tienda y alanzo a ver a una pequeña niña que se dirige sola a las escaleras eléctricas, la pobre tropieza y cae antes de llegar, bajo corriendo a auxiliarla, algo choca contra, me doy cuenta que choque con unos niños que traía consigo unos botes con pelotas al momento de chocar caen al suelo y lo único que trato de hacer es esquivarlas sin éxito alguno.

Al tratar de caminar entre las pelotas pierdo más el equilibrio y solo consigo tomar el brazo de un hombre, el al no darse cuanta de mi pierda igualmente el equilibrio y caemos, escucho el llanto de la niña y giro mi cabeza hacia las escaleras, noto que su madre va corriendo por ella.

Me saca de mis pensamiento un grito "¡el anillo!" Mi anillo" sale corriendo el tipo que cayó conmigo, lo sigo consciente de que fue mi culpa que perdiera su "Preciado" anillo, bajamos corriendo las escaleras, el anillo para en la guarida de un perro, conmociona pregunto "ahora que" el tipo solo me dice "vaya por mi anillo" obedezco y me dirijo a la guarida del gran perro dormido.

—    Recoja el anillo — susurra el tipo a lado mio.

—    Yo —pregunto un poco sorprendida.

—    Yo de verdad no puedo tocar a los perros, hágalo rápidamente.

—    Se ve que da un poco de miedo —menciono.

—    Hágalo —insiste el.



Había una gran barda de madera, le pedí que me ayudara ya que no podría bajar por mi cuenta, alguien tenía que "cargarme" para así poder tomar el anillo, sin querer hice un poco de ruido con el plato del perro y solo con ese ruido bastó para que despertara.

El perro da un ladrido y sale disparado a nosotros, alcanzamos a correr, ese perro no dejaba de seguirnos, corrimos por todo el centro comercial hasta que topamos. No había más paso había un letrero que decía "no pasar" el perro llego y solo pude decir "que haremos?" Ambos por alguna extraña razón estábamos asustados no sabíamos si el perro es agresivo o no.

El perro se lanzó sobre mí estaba tan asustada, no sabía que podía hacer en esta situación, volvió a mi mente el incidente de cuando tenía 7 años, recordé que había guardado la paleta en mi bolsillo, la saque rápidamente y la lance lejos de mi, el perro la siguió en ese momento se escuchan unos gritos.

—    Cereza —exclamo—. Cereza por qué la seguiste, esto es sabor cereza, verdad? —pregunto la dueña del perro con una apenada sonrisa—. El se vuelve loco si le llega el olor a cereza, así que por eso lo llamo cereza.

—    Usted debería atarlo bien —menciona el tipo a lado mio—. Que abría hecho si eso hubiera mordido a una persona.

—    Oh lo siento mucho, el usualmente es un lindo y educado perro, lo siento —se disculpó y se fue del lugar.

—    Mi anillo, mi anillo lo conseguiste verdad? —preocupado me dice.

—    Lo tengo —le muestro el anillo con una sonrisa amigable—. Lo hice bien verdad, su anillo está aquí.



El tipo toma mi dedo queriendo sacar su anillo, de tal fuerza que mi dedo sufre por esa acción, al fin lo saca por completo.

—    Mi dedo casi se cae —mencionó con un poco de molestia en mi voz.

—    Que clase de persona es usted, por qué está esto en su dedo? Este es el anillo que voy a usar para proponerme, es un anillo que otra chica no debería usar primero me dará su mala suerte —se quejó

—    Dado que estaba en un apuro lo hice para que no lo perdiera.

—    Además, porque corrió y creo esta situación?

—    Lo siento, pero no es un alivio que encontráramos su anillo? —comento.

—    Alivio? Que es un alivio? Este anillo todo alrededor de un desastre por su culpa y para acabar ese cereza o lo que sea la estaba siguiendo —me dice exaltado—. No hay nada que fuera un alivio, así que porque está diciendo que es un alivio?

—    Como se supone que iba a saber que el perro me estaba siguiendo debido al dulce?

—    Suficiente. Pero si me propongo y resulta mal, solo debes saber que será debido a ti y tu mala suerte ¿lo entiendes? —afirma molesto— sabes qué tipo de anillo es este? Tal situación desafortunada sucede tan pronto como lo compro, esta mala suerte.

Se aleja diciendo no se cuantas cosas más, que clase de persona es esa? Solo diciendo lo que él necesita decir. ¡DULCES! Apurada regreso al sitio donde caí, al fin los veo y están completos nadie los robo, me siento tan aliviada y me dirijo de nuevo al trabajo.

Destino..... ¿Estaremos juntos? (Justin Bieber & Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora