Destino..... ¿Estaremos juntos? (Justin Bieber & Tú)

Capitulo 7 :

Salimos del hotel, él sabía que no podía seguir ahí hasta que ese idiota se fuera, no puedo creer en lo estupida que fui.

— ¿Por qué le diste la oportunidad de escucharlo? —pregunto cruzando los brazos—. ¿Acaso eres tonta?

— Esto es mío —conteste viendo fijamente los pequeños pendientes.

— Y ¿Qué es? ¿Es costoso? ¿Valió la pena la humillación?

— Simplemente es mío —dije con un sollozo viendo fijamente a sus ojos—. Esto es sólo mío, en mi vida nunca tuve suerte con los concursos, pero esta vez fui elegida, incluso gane un viaje, finalmente la suerte viene a mi, solo, yo quería con todo mi corazón a alguien, solo quería amar a alguien con todo mi corazón, pero ahora ¿Qué soy realmente?

— ¿Por qué estás llorando —pregunto—. ¿ por qué lloras? ¿A quién tratas de complacer?

— Simplemente las lágrimas salen ¿Qué se supone que haga?

— ¿Acaso se ha terminado tu vida? Puedes demostrar que no y vivir de una manera genial, en serio tu gusto en hombres es realmente malo, llamar a eso novio, si tus ojos están mal entonces tu cerebro deberia estar bien al menos —exclamó.

— A mí, de verdad me gustaba el, mi apodo en el trabajo es post-it pero ese chico me trataba diferente, realmente me gustaba, es por eso que esperaba estas vacaciones tanto, prepare todo.

— Eso no tiene sentido —mencionó afectado—. ¿Por qué la gente que nos hiere tan bien es la que uno quiere? ¿Por qué la gente que lastima no sale igual o peor?

Mi mirada se posó en el, ¿Por qué él está sufriendo? ¿Estamos en la misma situación? Lo dijo de tal manera que parece que si, su rostro se notaba triste, ahora que lo veo bien es muy guapo, sus ojos y sus labios son especialmente hermosos.

— Sígueme.

— ¿A dónde vamos? —pregunto desconcertada.

— A partir de ahora no serás más un post it, serás un súper pegamento, te mostraré lo grandiosa que eres —afirmó.

Finalmente lo seguí, no tenía idea a dónde íbamos, salimos del hotel y nos dirigimos a su coche, la gente lo observaban de lejos, debo reconocer que el chico tiene presencia, si lo ves jamás vas a querer despegar tus ojos de el.

Por fin llegamos a un centro comercial, ¿Que hacíamos en un centro comercial? No pregunte pero él tampoco mencionó nada, el solo seguía diciendo sígueme, al fin paro en un salón de belleza, giro a verme y sonrío.

— Omg —dijo el estilista al verme—. ¿Que voy hacer? Es tan difícil.

¿De verdad luzco tan mal? Me sentía un poco avergonzada, más por el simple hecho de estar a lado de supongo una persona importante como el.

— En su estado actual, nos tiene que pagar el doble.

— No me importa si quieres el doble o el triple, no se preocupe por el dinero —advirtió—. Solo cambien su imagen de pies a cabeza, ustedes solo necesitan transformarla.

— Creo que me veo bien incluso ahora —murmuré por lo bajo.

— Esto es la peor parte —mencionó quitando mis gafas—. Cambien esto primero.

— Está bien, vamos.

Los estilistas me tomaron ambos por los brazos, no podía caminar yo sola, ellos casi me arrastraban.