Vmin¿Cantantes y espías?

Park Jimin

Esta historia comienza diecinueve años atrás en 1995, había nacido un muchacho muy adorable y carismático en Corea del Sur. Su nombre era Park Jimin.

Sus padres biológicos no eran pobres ni mucho menos, se podría se podría decir que eran "ricos"

Pero eso ya no importaba, una gran tragedia sucedió en el parto al conceder a su apreciado niñito, su madre tuvo que fallecer por no poder soportar tal dolor a su nacimiento, que tristeza al no poder ver a su querido hijo.

Mientras que su padre, condenado por la amargura y desesperación mando a su peque a un internado, más bien a una academia militar.

Jimin, al ser tan pequeño no pudo negarse e ir a esa elite de academia.

Los años literalmente pasaron en un abrir y cerrar de ojos.

Sobre a los cinco años conoció a su mejor amigo... Taehyung el cual lleva la misma edad de este.

Los dos eran inseparables. Taehyung o tae tae (llamado así por Jimin) los dos se fueron encariñado el uno con el otro. Eran, como el ratón y su queso, carne y uña.

En fin, se contaban cada secretito, aunque fuera el mínimo, cada uno se sabía el enigma del otro.

La niñez llego a su fin, dando lugar a la adolescencia, es un poco raro de contarlo pero no parecían niños "normales" se trataban de chicos donde la violencia corría por sus venas, una perfecta e implacables técnicas habían desarrollado al paso de estos años.

Taehyung al igual que Jimin, desconocía a su familia lo abandonaron con mucha frialdad y dejándolo en el olvido.

El centro militar, estaba programado para que salieran de esas personitas, armas, objetos de batalla, sin importar sus vidas.

Jimin, decido dar todo de sí mismo e ignorar el miedo a la muerte.

Varios meses después de esos duros entrenamientos, lo asignaron a otra corporación más adecuada a su nivel, ya que su rendimiento había mejorado extraordinariamente.

Lástima que su querido amigo no pudiera ir con él, Tae no fue capaz de seguir su rendimiento físico tan rápido a esa corta edad y con la decisión tomada abandono a su único ser apreciado.

A pocos años de finalizar su adolescencia, Jimin se había convertido en una máquina de destrucción increíble, no era como otros chicos que las armas son sus amigas, sin embargo para él su propio cuerpo era su arma. Exactamente, el joven Jimin utiliza movimientos ancestrales combinados con diferentes tipos de arte marcial lo que supone una indestructible barrera en cuerpo a cuerpo.

Esto, despertó a los grandes peces que hay por Europa, (me refiero a organizaciones, "mafias")

Una de las mejores corporaciones de espías se ofreció a acoger a Jimin en su asociación ya que para su "grupo" solo faltaba uno miembro y él lo completaría adecuadamente.

Pues el chico, acepto lo más rápido posible, recogió sus pocas pertenecías.

Al cabo de unos días. Una limusina negra, lo esperaba afuera del centro, él sin esperar ni un segundo se adentró en ella.

Allí estaban él y su supuesto "padre adoptivo" empezaron a conversar, sobre lo que pretende esta agencia y esto es lo siguiente que dijo:

- Hijo, si crees que ya te libraste de los combates, guerra y o violencia es que te has equivocado. Dónde vas a vivir aunque no te lo creas, tendrás que fingir ser un cantante de una banda musical, hable con los restantes seis, que supongo que te estarán esperando en la mansión y bueno... tendremos que ver tus dones al cantar y si no los tienes pues PRACTICARAS - Jimin estaba sin habla (¿seré cantante?) pensaba y la violencia esto se está poniendo interesante. - como decía muchacho, pertenecerás al grupo llamado Bantang Boys a secas BTS y aparte de eso te entrenaremos para que seas un espía de elite de unas cinco estrellas ya que tus condiciones físicas son realmente buenas, no te costara mucho, ¡ya verás! Entonces ¿quieres formar parte de" BTS"?

- Pues claro señor, em...- Jimin se quedó pensativo

- Llámame papa - dijo sonriendo.

- Bien, pues papa - dijo devolviendo la sonrisa.