Alterando El Destino (Death Note)

Rem

Luego de leer las dos cartas K tocó la
Death Note, había sido previamente
advertida que no se asustara, que
sea lo que fuera que iba a ver era
"amiga" y "no le haría daño"  de todos
modos gritó, no estaba lista para ver
lo que vió. Ella se imaginaba un
insecto o algo así. Rem le tapó la boca
y empezó a hablarle.

Rem- supongo que Ela te mandó a
buscarme -K asintió, no podía hablar- soy un Shinigami, un Dios de la muerte y esa libreta pertenece a Ela pero ella
te  la cedió, ya que si estás acá, es
porque ella renunció, como portador de la libreta podrás verme y yo tendré que seguirte a todos lados. Sólo quien toque la libreta podrá verme. -Soltó a K-

K- el plan de Ela es alejar la libreta
-aún temblaba un poco, pero no tenía todo el tiempo del mundo- de Light. ¿Cómo localizo la otra?

Rem- light sabrá como llegar a ella. Es un humano demasiado listo para mi gusto. -Se notaba que no le agradaba el sujeto en cuestión- aunque las cambien, Ryuk, el shinigami de la libreta de Light
tarde o temprano lo manipulará para que llegue a ella. -Dijo Ryuk con desprecio- él es un ser despreciable.

K- haremos lo posible porque sea lo más tarde posible.

Rem- si alguien pone en riesgo la vida de Ela lo destruiré aunque me destruya con ese sujeto -fue una amenaza-

K- lo mismo digo sobre mi hermano, si alguien intenta algo, ya sea Ela, Light o un shinigami se las verá conmigo.

Rem- es muy estúpido retar a un shinigami. -furiosa-

K- lo sé, pero si algo le pasa a mi hermano, yo no
tendría nada que perder, y no existe nada más peligroso que alguien que no tiene nada que perder.

Empezó a caminar, sabiendo de ante mano que Rem la seguiría a sol y a sombra, poco le importaba ese cuaderno negro, podía sentir algo por Light, pero también sabía que Light se había encaprichado en destruir a L, y eso no lo iba a permitir, aunque
tuviera que ocultar ese secreto a su propio hermano, el secreto de que tenía en a su alcance la prueba de que Light y Ela son o mejor dicho fueron Kira. Ocultar evidencia de un caso tan importante podría considerarse algo imperdonable, porque de algún modo eso la convertía en cómplice.

Una vez llegó a la base observó por el monitor, como jugaban y
competían con el videojuego como si fueran amigos o algo. Ambos
parecían dos jovenes inocentes, y
notó que su hermano había bajado la guardia, pues estaba sentado de un modo normal, eso le preocupó.

"Todos se merecen un día libre, pero mientras sigas esposado a él, no te confíes, estamos jugando con fuerzas que van mas allá de lo que nosotros fuimos capaces de imaginar" pensó
mientras miraba a su hermano, se
veía tan libre a pesar de estar
esposado. Ryuzaki jamás fue un chico normal, nunca se integró en el orfanato, le resultaba muy desagradable pasar tiempo con gente de su edad. Muchas veces habían querido adoptar a K, pero ella se negó, porque no quería que lo separaran de su hermano, nadie quería adoptar a L debido a que necesitaba atenciones especiales, y de algún modo Watari tampoco tenía intención de entregarlo, porque se encariñó con todas las manías del pequeño. Además luego de hacerle unas pruebas había descubierto su intelecto superior al de los demás niños. Supuso que esos dos niños eran perfectos para un proyecto que había estado conversando con su superior. L tenía una debilidad muy clara, sus capacidades para socializar eran nulas, dependía mucho de K, y eso era un obvio problema, porque si alguien supiera ese secreto sabrían como destruirlo. Es la razón por la que sólo dos personas saben el secreto.

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Pasaron unas cuantas semanas, y Rem no paraba de taladrarle la cabeza a K para que liberara a Ela, K aún sospechaba de ella, pero la prisionera había perdido varios kilos en lo estuvo encerrada y su salud empezaba a estar en riesgo, así que la soltó para darle de comer algo desente, si bien algo había comido durante el encierro no era algo que podría catalogarse como algo que alguien quisiera comer por voluntad propia.

K- sos libre por una hora, podrás usar el baño, y comer algo en la cocina, y luego volverás a la celda.

Ela- ¿por qué soy la única atrapada en esa mugrosa celda?

K- porque sos peligrosa...

Ela- ¿qué se supone que hice?

K- asesinaste personas...

Ela- yo sería incapaz... -buscó algo en sus bolsillos, se estaba desesperando al no encontrarlo- más le vale que no lo hayan perdido. -furiosa-

K- ¿qué sería eso tan importante? -burlándose de la desesperación de la chica-

Ela- la foto de mi padre... -sacudiendo su pie impaciente y con una vena en la frente-

K- la puse en una caja con tus pertenencias. Ya vuelvo -se fue a buscar las cosas de Ela-

Continuará...

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