Capítulo 11

20.4K 1.3K 123
                                    

James en multimedia.

Los días pasaban y los entrenamientos seguían, cada vez eran más estrictos. Aunque costaba que me cansara, me hacían llegar a mi límite. Agotando toda la energía de Caly.

Esta tarde llegarían mis amigos para también ser entrenados y mi familia ya que habían tenido un problema en casa pero nadie quiere decirme qué ha pasado.

-¿En qué estás pensando? - escucho y me doy vuelta para mirar al dueño de mi voz preferida.

-Estaba pensando que mis amigos y mi familia ya tienen que estar por llegar... y también pensaba en qué es eso que les pasó que no me quieren decir.

-Yo te lo puedo decir, pero solamente a cambio de un beso - me acerco sin pensarlo y lo beso - Entraron a tu casa y la destrozaron casi toda, los informantes de Adam dicen que los demonios tienen una alianza con los híbridos.

-¿Los híbridos?

-Sí, mitad lobos mitad demonios.

No termine de contestarle porque llegaba el auto de papá y todos gritaban.

Corrí a su encuentro y abracé a todos. La estaba pasando bien pero ellos son muy extrañables.

Hasta quise besar a mi hermano pero me detuvo. Lo mire desafiante.

-¿Piensas que tienes más fuerza que yo? - me burlo de Aris.

-Siempre pequeña Clea.

-Caly, ayúdame.

-Siempre.

Empecé a sentir toda la fuerza de Caly y me abalancé sobre él. Caímos al suelo y le pude darle un baboso beso.

-Sos un asco enana.

-Eso te pasa por desafiarme - le guiño un ojo y veo como James saluda a todos.

-¿Ya son novios? - tenia a mis tres amigos a mi lado esperando impacientes para que responda.

-No chicos, no somos novios pero tengo muchas cosas que contarles.

Sin mi permiso Gael me puso en su hombro cargándome como si fuera un costal y corrieron hasta estar a una considerada distancia ya que no nos podíamos alejar mucho.

-Ahora, tienes que contar todo - Beau me obliga a sentarme y así empiezo a relatarles todo lo que ha pasado estos días en donde no los he visto.

-Vaya ¿un vampiro? - Asiento - ¿es todo un papi? - lo dudo un poco pero termino respondiéndole que sí - Brentt te besó pero... ¿sentiste algo? - vuelvo a decirle que sí - y James es un experto besando...

Tengo la mirada de los tres sobre mí y me sonrojo.

-Que se haya sonrojado descarta nuestras dudas - chilla Amber.

-El lobo de Brentt te quiere Clea ¿crees que es capaz tu loba de mantenerse fuerte estando lejos de él?

-Yo... no lo sé... solo sé que mi loba quiere a su lobo cuando yo quiero a James...

-Yo digo que te quedes con el vampiro - todas fulminamos con la mirada al idiota de Gael - era solo una opinión, no se enojen.

-¿Algún consejo chicas?

-Yo te sugiero que pienses en lo que está por venir y sigas con James.

-Yo opino lo mismo - declara Beau.

Escuchamos unas ramas crujir y todos nos pusimos alerta. Los chicos se colocaron por delante de mí protegiéndome.

Los ruidos cada vez se escucharon más cerca hasta que un dolor en la cabeza que me hiso caer.

El dolor cada segundo era más fuerte, gritaba por la desesperación mientras mis amigos no sabían qué hacer.

-Tenemos que llevarla de nuevo... - aconseja Amber.

Controle todas mis fuerzas y grite.

-¡BAAAASTA! - el dolor inmediatamente paró. Me limpie las lágrimas y me levante con ayuda.

Delante nuestro estaba el asqueroso demonio sonriéndonos cínicamente.

-Hola mi hermosa Clea ¿Cómo estás? - camina unos pasos hacía nosotros pero Gael se le interpone.

-No te atrevas a dar un solo pasó más.

-¿Sino qué? - lo contraataca.

Gael estaba por responder pero el demonio lo agarró para acto seguido lanzarlo contra un árbol.

Me tire sobre él evitando que hiciera lo mismo conmigo, intente morderlo pero era rápido. Una vez que estudie sus movimientos, lo engañe y pude morderle la pierna.

Ya se la había destrozado pero llegaron más demonios con los licántropos que también eran mitad demonios.

-Caly necesitamos aullar, lo más fuerte posible. Necesitamos ayuda.

Caly me obedeció y aullamos con todo nuestros enormes pulmones. Quede sorprendida ante el semejante pero glorioso sonido de mi aullido.

Los demonios se alarmaron y nos atacaron.

Me coloque de manera que pudiera defender a mis amigos y así lo hice.

-Tenemos que protegerlos Caly, toda tuya la situación.

Y así fue como Caly se hizo cargo, mordiendo a todo lo que veía y evitando que saliéramos lastimadas.

Escuché como lastimaban a Beau y corrí hasta agarrar del cuello al demonio y cortarle la cabeza en un segundo. Aguantando el asqueroso y repugnante sabor de su jocosa sangre.

Para nuestra suerte llegaron todos los lobos y comenzaron a pelear.

Pude ver como a lo lejos el demonio que me provocaba los dolores de cabeza disfrutaba del espectáculo.

Comencé a correr en su dirección. Tenía que matarlo, él era el causante de todo esto. Tenía que matarlo primero de que él me mate a mí con sus propias manos o con el dolor de cabeza.

Estaba a punto de llegar a él pero el dolor volvió. Esta vez era tan fuerte que ni siquiera podía gritar ni controlar las lágrimas que salían solas.

No podía ver nada y ya había vuelto a mi forma humana. Escuche su risa resonar por toda mi cabeza.

Me apreté la cabeza con mis manos esperando que el dolor se fuera o solamente que disminuyera. Y cuando pensaba que no lo iba a poder soportar más me deje llevar por una hermosa y tranquila oscuridad.

-Todo va a estar bien Clea, todo va a estar bien - escuche como alguien hablaba en mi mente.

-Max...

-¿Quién es Max?

-Su lobo...

Y ahora sí me deje llevar.



La profecía de la lobaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora