Si mis manos no se cansaran, palparía cada flor, cada hoja de cada árbol en mi camino.
Si mis pies no se cansaran, avanzaría tanto como mi imaginación lo hace, buscando esos caminos escritos por los ya ausentes maestros de otras letras.
Si mi boca no se secara, hablaría por horas enteras sobre la maravilla pura y bella de la creación.
Si a mis oídos solo llegara la sinfonía de la naturaleza, pasaría largo tiempo hundido, soñando y disfrutando de la perfección.
Si mi cuerpo no se desvaneciera con el tiempo, danzaría igual que lo hacía de niño en el prado, bajo un rayo de sol amable, bajo luz de luna, luz de protección.
Si mis ojos no se cerraran un día, podría continuar deleitando el alma con la pureza terrenal que un día a todos se nos ofreció. Pero de la tierra vengo y a ella voy.
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Poesía para el Alma
PoetryUn espacio para dejarnos llevar por el maravilloso mundo de las letras hechas historia, poesía, cuento; llenas cada una de magia, alma y corazón...