capitulo 22

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- Me encanta caminar bajo las estrellas- hable.

- Sabes, he salido a caminar desde los 12 años a ver las estrellas, es algo que me gusta.

- Te sientes muy atraido hacia ellas cierto.

- En realidad me recuerdan a mi madre.

- ¿Tu madre?

- Si, ella fallecio cuando yo tenia 12 años. Siento que mi madre me cuida desde el cielo. El ver las estrellas es como visitarla cada noche.

- Siento mucho tu perdida, encerio que lo siento.

-No lo sientas, muchas personas sintieron lastima de mi en la preparatoria, y no quiero que tu seas una más que esta conmigo por lastima.

- No estoy contigo por lastima, es solo que el apoyo de algunas personas es de mucha ayuda en momentos asi.

- Me aisle de todo contacto humano luego de lo que pase, y a razon de eso me cambiaron de ciudad, de colegio, casa, etc.

-¿Y asi fue como llegaste a la preparatoria?

-Llegue desde la secundaria, pero nadie me conocia.

-Entonces,¿ jamas nadie te hablo?

-Confie en alguien una vez, y le conte la historia de mi madre.

- ¿Y que paso?

-Lo divulgo y luego de eso, la directora, profesores hasta la psicologa del colegio querian meterse en mi vida, con la excusa de que querian ayudarme, luego de eso me aleje y ya no volvi a confiar en nadie.

- No quiero que tomes a mal lo que dire. Pero a veces necesitamos de otras personas que nos apoyen.

Vi como Teo inhalo una bocanada de aire, y con el pesar mas grande de este mundo lo exhalo.

-Bueno, pero este no es el motivo de la salida- intentó disimular su dolor-  quiero enseñarte algo muy especial.- hablo Teo

Frente a mi se encontraba una puerta inmensa, la cual tiene dos pestañas que se unen en su centro, debo abrirla por la mitad, esta es de un material de madera con adornos metalicos.

-¿Que hay adentro?

- ¡Es una sorpresa!

senti como un pañuelo envolvio mis ojos, y mi vista quedo totalmente oscura.

- ¿a donde vamos?

Enseguida un silencio reinó en el lugar, mis sentidos se tensaron, mi corazon latio a mil por hora... Me quite la venda de los ojos, y contemple un lugar vacio, estaba sola. A la mitad de la nada y por mas que movia mi cabeza en todas las direcciones posibles no logre ver a Teo por ningun lado.

-¡Teoooo!-grite.-¡Esto no es divertido!, ¡te juro que si esto es una broma te hare pedacitos!

Comenze a caminar muy sigilosa por las calles, y en ningun lugar se encontraba Teo, trate de llegar al campus pero en la conversacion con Teo me desoriente, y no conocia las calles por las que estaba caminando.

-¡Teooooo!- grite inutilmente.

Al llegar a una esquina vi como dos hombres, alcoholizados, me miraron y comenzaron a seguirme. Rapidamente comenze a caminar, pero senti como si estuvieran detras mio. Comence a correr, pero mis intentos fueron inutiles, los dos hombres eran mucho mas rapidos que yo y con mucha facilidad me tomaron, y comenzaron a decir cosas horribles hacia mi, a tocarme y tratar de levantar mi blusa. Mis lagrimas comenzaron a envolver mis mejillas, y recorde algo que mi papa siempre me dijo:

"Si alguna vez te encuentras en peligro, grita: ¡FUEGO!, veras como las personas saldran de sus casas"

- ¡FUEGOOOO!-grite una y otra vez.

17 hombres y yo (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora