Me desperté y no estaba en mi casa, al parecer tendría otro problema con mi madre; camine hasta casa, al abrir la puerta ignore a todos y subí a mi habitación. Al llegar vi una pequeña nota sobre mi cama, la abrí, era una felicitación y recordé que hoy era mi cumpleaños; Terminé de leerla para saber de quien era pero en vez de tener una firma decía: "Te amo Rosi, eres la mejor. Pronto nos veremos." me dejó confundía y me sacó una sonrisa aunque eso no impediría que hoy me diera el mejor regalo que me podrían dar, la muerte. Estuve toda la tarde pensando hasta que mi madre me llamo para que bajara un momento,llegue y todos los presentes gritaron sorpresa, algunos hasta se les podía creer que les importaba pero no es así, estuve un rato con ellos; me disculpe unos minutos y subí a mi habitación, cogí una cuchillas y antes de bajar las escaleras realice un corte tan profundo que vi el hueso, terminé de bajar y antes de que pudieran decir algo caí por lo debil q me sentía; alguien me cogio en sus brazos, me abrazo y me dijo te amo. Nunca supe quien fue porque en ese momento cerre mis ojos para nunca mas abrirlos
