Despertando contigo.

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Y cuando desperté.

Te tenía entre mis brazos.

Fuerte me aferre a ti.

Temiendo a que fuera una ilusión.

Al despertar por el sol que atravesaba las cortinas le observe allí dormido a mi lado como un bello ángel, su nívea piel iluminada y su cabello mar reluciente si así he de despertar todas las mañanas deseo hacerlo por siempre, sonreí para acariciar su mejilla.

-mmmhh -Abrió sus bellos ojos mares que se llenaron de brillo y en sus labios una leve curvatura vuelta sonrisa era -Buenos días

-Buenos días -Pronuncie dejando un beso en esos tentadores labios -

-¿Qué hora son? -Pregunto aun sin muchas ganas de levantarse de la cama -

-No lo sé -Me moví para mirar el reloj en la mesa de noche -las siete treinta -Contestó haciendo que se acomode en mi pecho -

-Una hora más. .. Así por favor -murmuro volviendo a cerrar los ojos para intentar dormirse -

-Como gustes hoy no tenemos trabajo que hacer -Respondí viéndole asentir -

Me acomode mejor para tenerlo entre mis brazos bese su frente y luego sus labios deseando que esto no fuera una ilusión que me dejará vacía el alma.

Si esto es un sueño.

O Dios no me despiertes.

Deseo seguir durmiendo.

Para sujetarlo por siempre.

Me desperté nuevamente y él seguía dormido a mi lado no podría ser más feliz si fuera de otra manera solté un leve bostezo mirando la hora la mayoría ya debería haberse levanto, observe a Kaito-san que aún seguía durmiendo, me levante con cuidado dejando que abrazara a una almohada, me quite con cuidado los vendajes de mi herida, para bañarme, con tranquilidad, al finalizar mi baño, me quite la gasas y me puse unas nuevas limpiado adecuadamente la herida para que no se infectara y volviéndome a poner los vendajes, al salir del baño él ya estaba despierto, soltando un ligero bostezo.

-. . . ¿Por qué no me despertaste? -Me pregunto tallándose el ojo derecho -

-Te veía tan hermoso durmiendo que no quise despertarte e importunar tu sueño -pronuncie para dejar un beso en su frente y otro en sus labios -

-mmmhh... sigues -Se sonrojo al verme en toalla yo solo solté una ligera risa -

-pero querido no es nada que no hayas visto ya -pronuncie haciéndole sonrojar más y que desviara la mirada -Tan tierno

-Iré a mi habitación para bañarme también -Profirió para levantarse de la cama -

-Kaito-san -pronuncie haciendo que me mirara para plantarle un beso demandante en los labios - ¿salimos a desayunar? -Sus mejillas estaban coloreadas de un ligero rojo aun así asintió -

Y si esto es real.

O destino no me lo arranques.

Tú que eres tan caprichoso.

No mi ser desgarres.

Me vestí rápidamente, aunque claro quería arreglarme para él, esto sería como una cita al menos eso creía yo lo cual me hace bastante feliz, baje hacia el living donde se encontraban todos los demás mirándose los unos a los otros.

Solo una noche entre tus brazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora