Don't you worry Child

Capítulo 3: Monster

-¿Entonces?- Preguntó Scott lo más despacio que puedo a su compañero desde la infancia que se encontraba algo embobado con el documental de osos polares que les había puesto el profesor de biologia en primera hora. -¿Te leíste los libros que te llevaste de la biblioteca?-

-¿Eh?- Repitió River algo perdido con lo que le había preguntado su amigo. -Oh, si los miré así por lo alto. Todos dicen las mismas tonterías.-

-¿Tonterías?- Preguntó el joven.

-Hablan de lobos, brujas, híbridos, hasta de vampiros y de herecticos.-

-Heretics.- Rectifico Scott con un perfecto acento americano.

-Eso, vamos que perdí mi tiempo. ¿Y tu encontraste algo?-

-River, no son tonterías de los ocho libros que cojimos, todos hablan de estas criaturas.-

-¿Y que?-

-Y que las pruebas están ahí, más de 27 personas han sido matadas este año por allí y todas sin excepción han sido vaciadas de su sangre..-Dijo Scott elevando algo la voz. -Habla de esto con tu padre.-

-Buscaré algo relacionado con los Salvatore esta tarde y ya lo hablaré con mi padre, o lo intentaré.- Prometió el chico antes de volver a mirar el documental.

**

Veinte años habían pasado desde que una noche su mejor amiga se había tomado la cura contra el vampirismo junto al amor de su vida, Bonnie Bennett nunca había sido más feliz que esa noche ya que había conseguido hacer de sus sueños una realidad para ambos. Hoy la bruja había algo cambiado, fisicamente, aunque no demasiado ya que como bruja potente sabía cuidar su cuerpo. Si todos pensaban que la bruja terminaría casado con el más pequeño de los Gilbert, no era verdad, la bruja estaba hoy aún soltera. Seguía viviendo en su ciudad, en Mystic Falls donde había re abierto el Mystic Grill junto a su amigo Matt. De mutuo acuerdo los Heretics y ellos habían decidido que la ciudad era bastante grande para todos. Con sola condicion de no matar demasiado y cuando lo hicieran que fueran discretos, condición que no le gustaba demasiado a Matt pero contra una familia de Heretics no tenía mucho más que decir.

Para los que lo sabían, el Mystic Grill también tenía su parte sobrenatural, por ejemplo cada dos viernes estaba cerrado a los humanos y los que se atrevían a ir eran el postre. Otro cambio era que en el fondo a la izquierda Bonnie tenía su propio negocio de bruja, al que muchos nuevos vampiros iban para obtener un anillo contra la luz del sol, y también algunos lobos para abstenerse de transformarse cuando era Luna llena. Pero por ahora muchos de los que venían pedían informaciones a la bruja sobre un supuesto niño que tendría la sangre milagrosa.

Bonnie siempre les daba malas informaciones intentando alejarlos lo más posible del niño, pero después de quince años no siempre era fácil, además más los años pasaban más la gente se enteraba de aquella rumor, el niño estaba en peligro y sabían que su única esperanza era hacerlo vampiro. ¿Pero quien quiere quedarse encerrado en un cuerpo de quince años?

**

Damon Salvatore no llevaba mas de seis meses siendo de nuevo vampiro, cosa que no habia gustado a Elena, pero no era un opción, no podían permitirse de tener otros hijos y de hacerlos pasar por el mismo peligro que estaban pasando River y Judtih. Todos tenían miedo que al beberse la sangre de vampiro y morir, no se despertaria por haberse bebido la cura, pero Damon despertó y como vampiro. Obvio que lo tenía que ocultar a su hijo lo cual no siempre era fácil con un niño tan curioso.

Elena estaba más que ocupada con el lío de la casa y del bebé así que mandó a Damon a buscar su hijo que terminaba las clases y quien por culpa de su madre no podía volver sólo.

-Papa, ¿crees en las brujas?- Dijo River a penas entró en el coche. Damon empezó a reír, suponía que era normal preguntarse si las brujas existían. -¿Y en los vampiros?- De pronto el vampiro casi se atragantó al oír las palabra de su hijo.

-¿Dónde has sacado eso?-

-De unos libros. Siguo haciendo el mismo sueño de siempre y.. Creo que tiene que ver con Mystic Falls.- Dijo el chico sincero. -Pienso que deberíamos ir todos en vacaciones.-

-Ni hablar. Es muy.. aburrido allí.-

-Da igual, quiero ir.-

-No River. ¡No vamos a ir a Mystic Falla quítate ese pueblo de la cabeza!- Grito el hombre.

-¿Porque?- Preguntó el adolescente.

-Por que es demasiado peligroso.-

-¿Por que..?- Damon se quedo en silencio tras haber visto lo que acababa de decirle a su hijo.

El viaje se hizo en silencio y un silencio algo incómodo, River no estaba preparado para abandonar lo que había iniciado y Damon sabía que lo que se le había escapado le costaria mucho por parte de Elena.
Cuando llegaron a casa River subió a su cuarto haciendo escuchar un gran portazo lo que hizo llorar al bebé y Elena, furiosa, fue hasta su marido quien estaba sentado confuso en el sofá.

-¿Qué ha pasado?- Preguntó Elena igual de pérdida que Damon en ese momento.

-Tenemos que decírselo. Contárselo todo, Elena. Se merece saber la verdad.- Soltó Damon sin más.

-¿Estas loco? Lo estamos protegiendo, Damon. Menos sabe mejor.-

-¿Menos se sobre que?- Dijo River quien se encontraba en las escaleras. -¿Qué me estáis ocultando?-

-Nada.- Contestó fríamente Elena.

-Nada..- Repitió Damon cansado de la situación.

Ya no sabía lo que estaba bien o lo que estaba mal, tan sólo sabía que su hijo se merecía saber la verdad, se merecía saber que su familia estaba compuesta por varios vampiros, por lobos y por brujas. River se merecía saber que el y su hermana estaban en peligro porque su sangre era la cura del vampirismo. Se merecía saber..

-River.- Dijo de pronto Damon lo que le valió una mirada negra por parte de Elena. -Los vampiros existen, las brujas, los lobos, los híbridos, todo ese rollo. Existe.- Y antes de nada Damon sacó sus colmillos haciendo salir sus venas bajo los ojos y cambiando el color de estos a rojo vivo.

El niño quedó callado con los ojos abiertos y fue acercándose a su padre poco a poco.

-¿Eres un monstruo?- Preguntó el niño con miedo.

Damon no estaba preparado para esa pregunta, lo estaba para cualquier cosa pero no para contestar a eso ya que sabía que el fondo siempre sería un monstruo.