Capitulo 3.

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*Esto es antes de que naruto fuera adoptado por sasuke*.

Pov naruto.

No entendía porque ya la gente no adoptaba animales, la mayoría estaba aquí desde hace 2 años lo mínimo y aún seguían aquí.

Sobre todo los gatos! Nadie me quiere adoptar ni a otros gatos.

-no estés triste narutin-me palmeó con su enorme pata mi compañero de jaula-estoy seguro que saldrás de aquí.

Soy naruto pero él me dice narutin.

-no te preocupes-le sonreí falsamente, en realidad tenia un plan para escapar de esta prisión y cuando caiga la noche la ejecutaré.

-...elija uno-escuché decir por parte de Johnny, el chico que atendía.

Observé como un tipo alto, cabellos azabaches y un plante que hacia verlo muy adulto se me quedaba viendo.

Podría ser que...?

-ves?-se me adelantó akamaru viendo como el señor alto me agarraba y me llevaba lejos.

-adiós kiba-era como le decía por apodo, en realidad iba a salir?

Claro que si hombre, adiós jaulas hola libertad!

*Hoy*.

Me llevó al parecer a su casa, era una mansión para resumir, me dejó en un frío suelo.

-esta es tu casa, es inmensa, espero que no te pierdas-me sobó mi cabeza, su gentileza me hacia ver que estaba en manos correctas pero de tanto estar en celdas no siento que me este alagando.

Tan pronto que dejó su mano, salí a ver la grandeza que tenia en su mansión.

Cuadros adornados, flores y floreros en unas minis alcobas, unos cuartos de por ahí, la cocina, el baño, etcétera.

Por sorpresa, tenia hambre.

Mi "amo" me dio un tazón de atún, por lo que yo lo alejé de mi, se que en la prisión nos daban comida mal hecha y que olía mal, si iba a vivir con alguien tendría que darme comidas de lujos si o si.

Intentó saciarme con algo que fuera bueno para mi y todos los rechacé.

El sin que hacer fue a su habitación sin darme que comer.

-que tonto humano-fue lo que pensé.

Cuando estaba anocheciendo sentía que mi estómago quería comer. Pero el estúpido dueño no me daba nada bueno.

Mi nariz y mi excelente olfato olía un increíble aroma.

Seguí lo que mi olfato ordenaba y llegué a topar con una caja de sopa de ramen.

-me encantaría probar lo que tiene-pensé al intentar alcanzarlo pero no podía ya que estaba en lo más alto de la estantería.

Tiraba cosas al suelo pero no me importaba hasta que el ruido causó que mi amo despertara y me diera ese tazón con el ramen cocido.

Cuando me lo entregó saborié lo que había adentro y me lo tomé a grandes lamidas.

Estaba lleno y me fui por ahí, mi amo fue a descansar viendo tv, en cuanto a mi, jugaba por ahí con una bola de estambre que encontré ahí tirado.

Pasaron horas hasta que no pude aguantar el sueño, me dirigí donde estaba el señor alto, estaba viendo tv, se levantó sorprendiéndome y se fue a cenar. Al terminar se sentó en el sillón nuevamente, se le notaba el sueño que tenía así que me acomodé en sus piernas y me dormí ahí cálidamente.

Cuidando De Un Neko {SasuNaru}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora