Rebeca es una adolescente de 13 años a la que obligan sus padres a ir donde sus tíos a Francia en vacaciones de verano. Aunque a Rebeca no le gusta la idea de viajar al principio, poco a poco irán ocurriendo cosas que la dejarán patidifusa.
Llega el avión y Rebeca se despide muy tristemente de sus padres. En el camino, se pone a pensar en cosas positivas que puede tener el viaje, aunque no encuentra muchas. De pronto, se le ocurre una gran idea. - ¿Y si me pongo a dibujar para entretenerme en estas dos horas?- pensó. En ese preciso instante sacó de su maleta un papel y un lápiz y empezó a dibujar como se sentía ella en aquel momento. En el dibujo salía ella triste con una taza de café en la mano y su móvil en la otra.
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