«Mi vida
ha sido siempre
un naufragio,
una huida.
Me hundía
con la misma
facilidad con
la que volvía
a salir a flote.
Me quemaba
con la misma
facilidad con
que renacía
de mis cenizas
cada vez que
él se iba.
Parece que
me gusta,
esa inestabilidad
constante,
ese caos continuo,
esa vida al borde
del precipicio.
Soy irónica,
cuando llega
la calma,
solo quiero que
venga otra tormenta
a invadirme
y cuando
la tormenta
ya me cansa,
solo quiero que
llegue la calma
para poder
vivir con la
tranquilidad
que ella
me aporta
pero sin
la sensación
de sentirme viva
que experimento
con cada huracán
que se acerca
a mí,
con cada persona
que consigue
un hueco
en lo de la
izquierda.»
ESTÁS LEYENDO
"Entre subidas y bajadas."
Non-Fiction;y cada uno de mis demonios gritaban tu nombre.