{Prohibido ella es mía}

Capítulo 18: Rosas para Aurora.

Narra Aurora:

Seguía en mi oficina, a pesar que era de noche y casi me tenía que ir, trabajaba arduamente hasta tener el documento acabado. La puerta sonó.

Y cómo siempre yo afirmo. Me gusta mi trabajo y no lo cambiaria por nada del mundo. Ademas aquí está mi família, ya que la empresa es nuestra.

-hola señorita Aurora-hizo una reverencia la secretaria, tenía un gran ramo de rosas.

-estamos en confianza, hablemos de tú, eso de señorita, suena bastante culto y formal. -sonreí.

-está bien, alguién te a enviado este hermoso ramo de rosas , tal vez sea un enamorado...bueno la dejo seguir con su trabajo. Adiós -sonrió e salió de la puerta. Estaba realmente sorprendida. Así que no tardé mas de 3 segundos en abrir un pequeno sobre que estaba en el gran ramo.

Pequeña Aurora... Me estoy volviendo loco...quiero besarte, abrazarte, necesito sentir tu diminuto cuerpo pegado al mío. Te amo.

Tf.

Dios realmente, es precioso. Al parecer es el mismo anónimo. Agarro una rosa, cierro mis ojos y sonrió.

¿Quién será?

La puerta de mi oficina se abrió, algo nerviosa deje un lado la rosa e intento parecer normal.

-hola...

Mis ojos se abren y trago saliva fuerte.

-necesitamos hablar-dijo.

-¿q-que haces aquí? -le pregunto borde y nerviosa.

Realmente Ariana es pesada...

-¿De que quieres hablar? -me acomodé a mi asiento.

-os e hecho mucho daño a él y a ti. Y eso es algo que e hecho mal...Me siento muy culpable. Sólo e venido a pedirte disculpas hermana, e arruinado vuestro amor. Si no hubiera sido por mí. Nada hubiera pasado.-se disculpaba mi hermana. Su mirada mostraba sinceridad, algo que me gustaba. Una luz en mi interior se iluminó al escuchar estas palabras salir de mi hermana.

Sonreí, me levanté de mi asiento y la abracé.

Todo perdón sincero , merece ser perdonado.

Ella hizo lo mismo, me abrazó e sonrió.

-mi pequeña hermana...Mi bebé, siento haberte hecho tanto daño-sollozó ella. -no digas nada...sólo abrazame - dije.

☆☆☆

-no estoy nada feliz...el me hace sufrir. Yo Realmente quiero estar con un buen hombre.-dijo mi hermana.

-lo sé, yo también quiero estar con alguien que valga la pena-dije haciéndo una mueca.

-¿y ese ramo de rosas? - señaló hacia este.

-alguien, me está enviando cartas y rosas y cosas de esas...

-dios están hermosas...¿no sabes quién te lo a enviado?

-no-negué.