«Bisexual shits»

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Este capítulo no tiene dedicación especifica. Esto es para vos, que me estás leyendo. Que llegaste hasta acá, uhm, no puedo describir nada de esto. Nunca pensé que iba a llegar tan lejos, algo hecho por mí, que sale de mi atrofiada cabeza. Una obra que comenzó gracias a mi mejor amiga, que me vio un día y dijo "deberías escribir, ya sabes, para descargarte." no tengo palabras para agradecerte la existencia, Lucia, te amo. Gracias a mi hermano que me apoyo desde siempre, gracias a mis amigas y a todas esas personas que han apoyado BS desde que llegaron, su presencia  su voto. Todavía no parece real, ¿cómo puede ser que me emocione aún cuando veo "Tienes un nuevo comentario"? No sé, pero la sensación esta desde ese 01/11/2015 que comenzó todo, no se va, no se ira. Bisexual Shits va a quedar para mi historia, ¿quién lo diría? una creación de Vidas Pxrfectas y yo tuvo lujo, ¿cómo agradecerles tanto? No puedo. Simplemente, gracias por formar parte de esta pequeña obra.

Los ama con toda su extraña alma, Blue.

Final (parte 2/2)

Capítulo narrado.

Julieta hoy no sonrió, estaba mal, desecha y melancólica. Sus "amigas" la habían ignorado todo el día, reprobó Geografía y todo aquel que la quisiera ofender, lo lograría.

Cansada y triste, caminó en soledad hacía los tranquilos árboles del campo. Se sentó debajo de uno de ellos. Y explotó.

Comenzó a llorar, escondía sus ojos rotos entre sus piernas, se abrazaba a sí misma. Por que ella es la única persona a la que tenía.

Después de un rato largo, de llanto sin cesar y sollozos desprevenidos de vez en cuando, escucho como unos pasos fuertes contra el pasto se aproximaban. Se asustó, no supo que hacer y solamente espero lo peor.

"Oh..." susurró una voz, dios, creyó que conocía esa melodía grave y tranquila, compasiva y familiar. No sabía que responder para intentar sonar tranquila, no iba a permitir que la vieran débil. Ya nunca más.

"V-vete, por f-favor." definitivamente, eso no era disimular.

Estúpida, estúpida, estúpida.

"No te lastimo." sintió una mano grande y suave en su espalda, un calor recorrió cada célula de su cuerpo. "Tranquila, estamos solas." intento tranquilizarla, intento.

"Todos me lastiman." respondió seca, sin vacilación. Un pequeño sollozo escapo de sus labios, estaba destruida.

"Puedes... Puedes confiar en mí." hasta pudo sentir que sonreía "¿Quién mejor que una perfecta extraña?"

Extraña, perfecta extraña. ¿Qué? Reconoció por primera vez su voz, rezo a todo astro del universo para que no sea ella... Diana. Levantó la mirada, asustada e intentado controlar su respiración, sin éxito. Mierda, mierda, mierda. Supo que el color había abandonado su rostro, sin necesidad de decir algo para demostrar lo que estaba sintiendo en ese momento.

"¿Pasa algo?" habló de nuevo.

Diana, es Diana. Tranquilízate Julieta. Pero es Diana, Diana, Diana "Diana." oh mierda, lo dijo.

"Oh, entonces tan extraña no soy." bromeó.

¿Extraña? ¿Hablaba en serio? Jesús, estuvo enamorada de ella desde inicio de año. La había visto reírse con sus amigas mientras abrazaba a, suponía, sus compañeros. La cautivo desde ahí, y, desde entonces, la estuvo conociendo desde lejos, sin poder admirar su voz de cerca, sin poder sentir su calor. Pero, maldita sea, claro que la sentía. La sentía ahora, la presenciaba ahí, sentada a su lado. Estaba con ella en esas noches de lluvia en las que no sabía que hacer con su angustia, estaba cuando le respondía los mensajes, estaba, está.

"D-Diana... Yo soy..." ¿se lo iba a decir? Había tantas opciones, podría reaccionar mal. Podría reaccionar bien. Simplemente se levantaría y se iría, o se quedaría con ella. Puede asustarse, puede tener comparación. Puede, podría, dios...

"¿Qué?" murmuró la castaña, animándola. ¿Lo haría?

"Soy Julieta." susurró, desviando la mirada lejos, no existía humano mas asustado e impaciente que ella en este momento.

Diana, oh Diana. Ella sonreía, se olvido de todo problema por ese mismísimo momento, la había encontrado, por fin.

Pero quería que lo repitiera.

"¿Quién?" dijo, divertida. Camuflando su sonrisa.

"No me hagas repetirlo." se quejó, ocultando su rostro entre sus manos.

De pronto, sintió como unos brazos grandes la sostenían, con sorprendente fuerza la levanto un poco para dejarla sobre sus muslos, permitiendo que Julieta abrazara su cuello, llenándose de la fragancia inglesa que poseía en sus fosas nasales.

"¿De verdad pensaste que no me ibas a gustar?" preguntó Ventura, sorprendida.

"Es que... Uhg." se quejo "hay miles de chicas mas lindas que yo, y..." no la dejo terminar.

Diana, siendo Diana. La tomo de la barbilla, exigiendo y necesitando conexión visual. Una combinación de verde y miel hacían el color mas maravilloso del mundo, en ese momento.

Le miro los labios, carnosos y rosados natural. Tranquila, Julieta intentó decirse, pero ¿cómo se podría controlar? la tenía ahí, junto a ella. Solo con ella.

Ambas dieron el movimiento indicado, en el momento preciso, uniendo sus labios.

Diana comenzó a reír sobre sus bocas, contagiando de felicidad a Julieta. No se separaron, no tenían planeado hacerlo. Aquello era perfecto, ¿por qué no ser feliz?

"Creo que..." hablo Diana "dicho y hecho. Estoy enamorada de ti al 100%"

"No está mal, que terminen las historias. Mientras haya historias que contar."