"Un Sueño Hecho Realidad" •Rubelangel•

Capítulo ocho...

Mangel

-Si, nos habíamos besado.- termine de decir esas palabras y me sonroje de inmediato.

Rubén me miraba de costado con una sonrisa. Se notaba que estaba... ¿avergonzado? Bueno, sonrojado diría yo.

-Con que se habéis besado, eh chavales-dijo Melo haciendo una cara en plan pervertida. -, ¿Y COMO FUE?- exclamó, casi gritando.

-Y no te imaginas- Cheeto reía al decir aquello. -Un poco más, terminaban cachondos.- termino diciendo.

-Y si, me imagino-exclamó Melo, levantando una ceja hacia arriba.

-Podéis parad con esto por favor- dijo Rubius, con una risa, esa risa que hizo que me den escalofríos por todo mi cuerpo. -solo fue un beso, y no no lo volveremos hacer.- Rubius me dirigió una mirada asesina y seductora a la vez.

Llegamos al hotel.
Estábamos yendo a nuestras habitaciones, ya que llegamos un poco tarde de pasear. Rubius se habia quedado en la habitación de Alex, ya que Cheeto, Frank y Luzu iban a jugar a un juego, que literalmente no me acuerdo.

Entré a mi habitación. Me saque los jeans y la camisa que llevaba. Me acosté, quedando completamente en boxers. Me quede unos minutos con mi móvil. Hasta que me quede profundamente dormido.

De repente, escucho que se abre la puerta de mi habitación; me hice el dormido para saber quién coño era.

Sentí, que alguien se metía entre las sabanas. Trataba de no estremecerme ante el contacto de ese "alguien".

-Mangeeel,- esa voz realmente se me hacia muy conocida-¿Estas durmiendo pequeño capullo?- y lo supe era Rubius. ¿Pero que hace el aquí? Pensé pero no lo dije.

-Sabes Mangel,- siguió diciéndome cerca de mi oreja, haciendome que me agarre las sabanas con fuerza para no estremecerme ante su voz -no se si me escuchas, pero, queria decirte, que SE QUE NO ESTAS DORMIDO- exclamó casi gritando.

¡Pero este tío es gilipollas.!

-¿Que haceh aquí Rubiuh?-pregunte un poco cabreado.

-Solo quería verte, estar contigo, eso quería.- dijo acercándose a mí. -Es que Mangel, realmente aunque lo intente.... -dijo mirando hacia otro lado, soltando un suspiro -, no puedo dejar de pensar en tí.- término de decir.

Me había quedado en shock durante unos segundos. No sabia que responder.

No aguante. No pude contenerme.
Agarre a Rubén y lo acerque hacia mí, rompiendo la distancia que había entre nosotros.

Lo agarre de la cintura, acorralándolo contra la pared, Rubius soltó un pequeño gemido en mi boca, haciéndome estremercer.
Agarre su pelo, enredándolo en mis dedos, para que no se separara de mi. Empecé a acariciar su espalda, pegándolo aun mas a mi. Rubius me agarraba de los hombros, acariciandome la espalda, bajando poco a poco hasta mi parte trasera.

Empecé a darles besos en su cuello, dejando pequeñas marcas moradas y rojas alrededor su cuello. Llegue hasta su "punto débil" que lo hizo soltar una pequeña carcajada. Lo agarre nuevamente de la cintura, llevándolo hacia mi cama; recostándolo. Me puse arriba de él besándolo; mordiéndole el labio inferior con un poco de fuerza. Esto hizo que el gemido de Rubén quede ahogado en mi boca; Rubius giro, haciendo que el quede arriba mío.
Estabamos excitandonos. Esto va acabar de otra forma..

Y creo que ambos nos va a gustar....