Décιмa Págιna.

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Dedιcada a @hunxohan


→ Veιnтιcυaтro de Novιeмвre del 2015.

|8:00 P. M.|

Me acuerdo cuando era pequeña... Las cosas eran fáciles para una niña de siete años.

Solo corría, jugaba, comía, lloraba...

Siempre recibiendo regaños de su mamá por meterse en problemas.

No tenía miedo de nada.

Sólo una cosa.

Cada sábado, íbamos a casa del abuelo para visitarlo, era en el campo, por un río camino abajo.

Nos quedábamos a dormir para luego en la mañana irnos.

Mi pesadilla era una que nunca se acababa.

A la noche, nos quedábamos un rato viendo películas en la habitación que teníamos ahí, nuestra habitación, después de eso, papá apagaba la TV y nos preparábamos para dormir.

Mi hermana, en ese tiempo, tenía 9 años, y dormía en una cama pequeña.

Yo, dormía entre mi mamá y mi papá en una cama matrimonial.

Bueno, yo dormía tranquila.

Hasta la mañana.

Cada domingo, me despertaba en la mañana, en la cama sola, sin mi mamá o mi papá al lado, o a mi hermana en su cama.

Siempre me sentía así sola. Empezaba a llorar porque pensaba que me habían dejado sola y nunca volvería a ver a mis padres y ni siquiera a mi hermana.

Pero al escuchar el motor del carro, y la puerta abriéndose más, sentí que el alma volvía a mí.

Y ahí llegaba mi mamá a cargarme y a a ayudarme para vestirme e irnos a desayunar y después a irnos a nuestra casa.

Todos los sábados, todas las semanas, eran así.

°Diario°. No leer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora