Una locura Excitante |Rubelangel +18

Esto es una Locura Excitante

POV Mangel.

Había dicho que también gustaba de mi...dios esto es grandioso y lo más grandioso aún es que me está besando...Mi rubiuh me esta besando.

Al rato correspondi el beso, nuestros labios encajaban a la perfeccion, su lengua pidió permiso para explorar mi boca y se lo concedi, nuestras lenguas hacían un baile fugaz hasta que nos tuvimos que separar por falta de aire, pero al rato el ojiverde volvio a juntar nuestros labios, pero esta vez el beso fue subiendo de tono, había más....pasión en el.

Rubius me empujo lentamente hacia atrás en el sillón quedando el encima mío, empecé a sentir como el calor adueñaba mi cuerpo, solté un gemido al sentir sus labios en mi cuello dando pequeños mordiscos y besos, entonces fue cuando algo en mi se despertó. Lo tomé de la cintura con fuerza.

–Ah...Mangel.–gimio Rubius haciendo que lo que sentía creciera.

Con todas mis fuerzas me senté y me levanté con el en brazos, empecé a caminar hacia la habitación, al llegar cerré la puerta con una patada y lo recoste en la cama. Lo mire con lujuria, me despoje de mi remera y lo tiré en alguna parte de la habitación, me puse encima suyo y lo volví a besar.

Mis manos empezaron a explorar debajo de la remera del castaño y fueron hasta sus pezones, empecé a pellizcar cada uno de ellos, sentía como Rubén se estremecia con cada tacto, saqué su remera ya que empezaba a estorbar, empece a dar pequeños besos en su cuello hasta bajar a sus pezones de nuevo para ahora empezar a mordisquearlos.

–M-Mangel, mhm joder.

Mis labios fueron bajando hasta encontrarse el borde de sus pantalones, lo mire como pidiendo permiso y el asintio, sonrei. Desabotone el pantalón y lo bajé de un tirón causando un leve gemido departe del castaño y entonces vi al gran bulto que se encontraba debajo de ese fina tela, mordi mi labio inferior y me acerque a lamerlo encima del boxer.

–Ahh...si

Los gemidos del castaño era como música para mis oídos, con tan sólo pensar que yo provocaba esto me prendía demasiado. Sin pensarlo dos veces bajé el boxer de Rubius y deje a la vista a su gran amigo, lo mire y pude notar que estaba rojo, sonrei y me puse a su altura.

–Tranquilo Rubius...eres muy hermoso -– susurre en su oído y pude ver como su piel se erizaba.

Bese su cuello y dirigí mi mano a su erección lo tomé entre ellas y empecé a masturbarlo, cada vez subía más la velocidad al notar como gemia.

– Ahh..sí Mangel..Mangel sigue ....n-no pares.

Hacia caso a su pedido y fue entonces cuando volví a bajar y lo introduje en mi boca.

–AH! Mangel! joder mmh.

Empecé a mover mi cabeza de arriba a abajo, sentí como sus manos se posaron en mi cabello y lo cogió fuertemente causando un gemido de mi parte, empezó a mover mi cabeza controlando la velocidad, cada vez aumentaba más sus movimientos.

–Siii ahh dios – gimio.

Me soltó y seguí haciendo movimientos con mi cabeza hasta que..

–Joder Mangel! ahh m-me corro.

Y entonces sentí como se corría dentro de mi boca, lo trague, me relami los labios y lo mire con lujuria, encontrándome con sus sus ojos verdes que se habían oscurecido varios tonos.