Capítulo XI

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Me levante del sofá para mientras que lo miraba atónita. No entendía a lo que quería llegar, así que al levantarme me separe de él para mientras que apenas solo tenía puesta mi ropa interior empecé a caminar en circulos, él no dijo otra palabra más solo se limitaba a verme para mientras que sus ojos no demostraban nada ni una expresión de lo que estaba sintiendo ahora mismo. Paré para mientras que me ponía de nuevo en frente de él y con mis nervios le pregunte de que se trataba ese contracto.

-Te escucho. -Me miro.

Se sentó en el sofá para mientras que me hacía un gesto que me sentara a la par de él pero me negué, quería saber lo que trataba de decirme porque algo en mí decía que este no era un simple acuerdo de sexo temporal.

-No sé, si debas de meterte en mi terreno, Scarlett.

Rodé los ojos, me frustraba cuando me veían como una chica débil e incapaz de ser algo mayor. Crucé los brazos, él solo miraba hacía el suelo por lo menos no podía verme los gestos porque a estas horas para mí ya estoy maldiciendo.

-No crees que ya me metí en tu terreno. -Empecé a decir.

-No nena, apenas has puesto un pie en el. -Suspiró.

-Dime que es lo que me ocultas, James. -Le dije.

Note como abrió su boca para luego cerrarla y negar. Empezó a levantarse para notar que empezaba ponerse su ropa y yo como una idiota aquí esperandolo. Quería golpearme contra la pared de la casa y a él darle con el jarro que tenía. Mi humor había cambiado pero eso no quiera decir que estoy a gusto con la probadita que me acaba de dar. Comencé a caminar hacía la cocina pará mientras que abría la nevera sentí el frío aire que el aparato expulsaba de adentro. Saque una botella de agua helada y para mientras que me la tomaba sentí uno cuerpo detrás de mí que al dejar de tomar agua en vez de verlo, empecé a tapar la botella con el tapón.

-Te puedes ir ya. -Dije con desagrado.

-Mira Scarlett, te podría decir sobre el acuerdo pero no puedo porque te veo...-Me di la vuelta para verlo.

-Ya deja el drama ¿quieres? Soy una chica independiente, se cuidarme sola, se mis gustos y lo que quiero hacer o no con mi cuerpo. No me veas como una chica débil porque eso es lo que no soy. -Se lo quise dejar muy claro.

Con sus gestos que hacía se veía totalmente muy sexy pero ahora no debo de ponerme en ese plan o sino al final de nuevo caere en sus pies y no podré hacer nada. Debo de sacar mi caracter guerrero así como lo hacía mi padre y madre conmigo.

-¿Eres valiente? ¿Te sientes capaz de lo que pueda hacer contigo? Es algo que no todos pueden con ello y que ocasiona mucho dolor. -Mi piel se erizo al escuchar eso.

-Porque me lo dices. -Dije con una voz apenas escuchable.

-Porque si tu quieres meterte en mi terreno, Scarlett. No podrás salir nunca jamás y no habrá marcha atrás.

Además de darme miedo me daba un placer intenso saber a lo que él me proponía. Pero meterme con apenas un conocido eso es algo a lo que yo no me arriesgaria. No voy a negar que me atrae y me atrae lo que dice pero si él dice que no habrá vuelta atrás, que ganare yo con seguir dentro de su terreno jugando a algo que al final me pueda o no gustar. No me probado aun el sexo pero no quiero llegar a un extremo con él, se que James no busca que lo quieran, él solo busca satisfacerse y para mí eso sería un veneno que si lo dejo seguir entrando en mi cuerpo al final me matara y ya no solo lo veré como un juego sexual sino que algo más que puede hacer que me arrepienta.

Lo mire para mientras que debajo de sus pestañas muestra como sus ojos quieren que entre en su juego y que diga que acepto a toda condición que él me proponga pero ahora mismo me siento insegura que no sé como lidiar con la situación. Por lo menos se que si acepto a su acuerdo lo tendré a él aunque eso no me proporciona una gran libertad porque tengo pensado que él podrá hacer cualquier cosa con su cuerpo y con quien quiera en cambio conmigo será lo contrario y querá que solo sea para él. Trabajar de sumisa creó que es algo que a mí me daría un poco de miedo porque pensandolo bien no se como me resguardare de todo ello.

50 Secretos Más OscurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora