Llegamos a Miami por la mañana. Me hospedaba en el mismo Hotel que Jace y Maeve, pero Alonso venía conmigo. Obviamente no dormiriamos en el mismo cuarto pero necesitaba que él estuviera ahí conmigo, el me transmitía mucha confianza, y era justamente eso lo que necesitaba para no flaquear más con Jace.
Cuando llegamos al hotel llamé a Jace.
-Estoy en el 202. -dije a través del teléfono.
-¡Genial! Estamos abajo, en la piscina, Ponte tu traje de baño y baja a darte un chapuzón. -dijo
-si claro, con lo cansada que estoy ya quiciera ir a la piscina.-dije mientras me sentaba en el borde de la cama.
-No sería mala idea.. -me interrumpió Alonso -bajemos para relajarnos. - Alonso estaba conmigo, su cuarto quedaba frente al mío, y ni bien dejó sus cosas cuando entró conmigo para ayudarme a desempacar un poco.
-¿Quien esta ahí contigo Nani? -pregunto Jace a través del teléfono.
-Alonso, vino conmigo.-me dirigí hacia el balcón que miraba justo a la piscina. Pero no pude divisar a nadie en particular. -¿Algún problema? -dije mientras lo veía desde arriba.
-No, ninguno. - lo oí resoplar. -Nani ya baja ¿si?, bajen y compartimos todos juntos.- dijo pero me sonó un poco raro.
-okay, nos vemos en un rato. -dije antes de colgar.
-¿le molestó que haya venido? - pregunto Alonso con una tierna cara atrás de mí.
-No, para nada. Abajo esta Maeve con él. ¿Por que no vas a cambiarte, yo también lo hago y bajamos si? - le dije sonriente.
-¿segura que quieres ir? -
Asentí.
-bien, nos vemos en ¿Diez minutos?-dijo Alonso.
Asenti de vuelta y me dio un casto beso en los labios antes de irse.
Cuando bajamos Maeve me vio primero y vino a saludarme.
-Jace me dijo que vendrías, pero nunca dijo que traerías a alguien.- Dijo Maeve fijando en Alonso, que debo admitir estaba mas bueno de lo que creía. Porque aunque era flaco, tenia todos los músculos marcados. Vamos, que te daban ganas de refregar ropa en esos abdominales de chocolate blanco que tenia él muy papas.... Ehh Alonso.
-Bueno, él es mi invitado. Maeve, Alonso. Alonso, Maeve.- los presenté.
-un gusto.- dijo Alonso estrechándole la mano.
-Él gusto es mío. Y diganme... Ustedes dos..- Maeve hizo señas hacia nosotros dos. - ¿Estan saliendo?- preguntó.
-Nos estamos conociendo.- respondi.
-Pero la idea es que lleguemos a eso.- Dijo Alonso rodeandome los hombros por él brazo.
-No me habías dicho nada Nani. Ay ____ ojala que les resulte. -Maeve sonaba mas emocionada que yo incluso.
Jace llego y fijo su mirada en mí. Me examino de pies a cabeza, y sentí que toda mi piel ardía.
-Cariño, mira. Nani vino muy bien acompañada.- Maeve me hizo un guiño, y por primera vez, quise golpearla por su efusividad.
Alonso y Jace se saludaron cordialmente y le hice señas a Jace para que me siguiera la corriente.
-hey cerebro de consola...- le dije a Jace
-¿tu realmente no sabes cuanto detesto ese apodo verdad?- dijo Jace
-Claro que lo sé, pero necesito fastidiarte.-dije
-eres incorregible.- dijo
Lo tome del brazo y lo jale.
-Aggh no te pongas gruñón que te rayas cerebro de consola, y vamos a conseguirnos algo de tomar que me muero de sed. Alonso ¿Quieres algo? - pregunté.
-Lo que tu tomes esta bien para mí.- dijo
-¿Y tu Maeve?-
-Otro jugo de Naranja, gracias.-dijo
Fuimos jugueteando, Jace y yo , de camino al Bar hasta perder de vista a Alonso y Maeve. Entonces lo solté y me puse seria. No hablamos hasta sentarnos y hacer nuestros pedidos.
-Jace, yo no sé qué te paso en ese viaje a Amsterdam que volviste tan extraño. Primero nos quedamos un poco demasiado cerca uno del otro en mi camerino. Luego vas y me haces una escena en mi cuarto. Y Jace, Dios sabe que de verdad odio que intentes jugar así conmigo....-
-No estoy intentando jugar contigo Nani, no digas tonterías.- me interrumpió.
-¿Ah no? Entonces ¿Que demonios quieres Jace?- lleve mis manos a mi pecho y sentí un nudo en la garganta. -Tu sabes perfectamente cuanto me costo tenerte como amigo desde que te conocí, y cuanto me costó que siguieras siendo mi mejor amigo después del beso erróneo que nos dimos hace mucho tiempo atrás. Y ahora estas con esta mierda Jace. Y yo no lo voy a aguantar, tu estas con Maeve, y la amas, así que respetala y dejame también a mi ser feliz con quien a mi me plazca.
En su rostro se notaba consternación, mucha consternación como si estuviera aflijido o apenado.
-____ yo....- Suspiro, negó con la cabeza y liego continuó.- Tienes razón. Perdóname. No sé qué me paso, supongo que solo, no sé, estoy celoso de que hayas encontrado a alguien y no, no quiero que me dejes de lado o, no se....-se paso las manos por él cabello alborotandolo.- Soy un idiota, y un mal imigo. Había discutido con Maeve y me tomo de sorpresa que me dijeras que era tu tercera cita con alguien. Y fui un maldita egoísta. Soy un maldito egoísta.- dijo
Mil novecientas cosas pasaban por mi cabeza. Quería golpearlo, y quería abrazarlo ¿esta celoso? ¿Tiene miedo que lo deje solo? Eso es muy muy muy estúpido. Es una estupidez a gran escala. Pero son mas estúpidas aun las otras razones, ¿Discutio con Maeve? Siempre que discuten va junto a mí, eso no es raro pero ¿tener esa reacción? Nada de lo que me dijo me convence realmente del todo, y hace que me duela aún más él corazón.
-Por favor Nani, eh sido un irresponsable con tus sentimientos en estas semanas y lo siento por eso. Te primero que no volverá a pasar. Y tienes razón yo, yo debo respetar a Maeve, nosotros estamos juntos hace tanto tiempo que no es justo que le haga esto, y mucho menos a ti. Pero por favor, no te alejes de mí. Eres mi mejor amiga.- dijo
Con ese tono de súplica, esos ojos que piden perdón y esa cara tan fea pero perfecta que se arruga cuando esta triste ¿quien no lo perdona? Odio a Jace por tener ese efecto perdonalotodo en mí. Si es un egoísta, y sí, soy una maldita blanda por disculparlo ¿pero qué más da? También es mi mejor amigo, por sobre todas las cosas, y mi mundo no es lo mismo sin él.
Él Barman me entregó nuestras bebidas en una bandeja y un vaso de agua helada que le pedí justamente para esto... Se lo derrame a Jace por la cabeza lentamente y, literalmente se quedó helado de sorpresa, se levantó y rápidamente y me miro confundido.
¿Que demonios Nani???-
-Te dije que quería echarte agua hirviendo.- Dije encogiéndome de hombros inocentemente.- Pero hubiera sido demasiado. Espero que así se enfríe tu cerebro de consola, pero no lo vuelvas a hacer ¿okay?-
Agarre la bandeja con las bebidas y me fui caminando como si nada hacia la piscina dejando a todo él mundo sorprendido o riendo detrás de mí.
