The Photographer ~Jelena~ ( adaptada)

final

-¿Crees que pueda ir a visitar a la abuela? -le pregunte a mi papá, después de haber desayunado.
-No lo sé. La abuela vive como a 2 horas de aquí y yo tengo que trabajar.
-No te preocupes iré sola y tú te vas a trabajar. Y traigo la cena, así tu ya no haces nada.
-¿Cena? Así que planeas irte todo el día y dejarme...
-Papá, puedes comer con Marian. Le gustas -le guiñe un ojo para después subir a mi habitación.

Cerre la puerta y me recargue en esta. De nuevo me encontraba llorando, todo el tiempo lo hacía, pero no dejaba que nadie me viera. Debería superar esto, él nunca me quiso realmente.

Me limpie las lágrimas y entre al baño. Me mire un momento en el espejo. Me veía fatal. Me empecé a despertar cuando sentí el agua fría cayendo en mi cuerpo, sobresaltándome. Necesitaba eso. Pero ahora las lágrimas se mezclaron con el agua, no podía dejar de llorar. Encerio me dolía.

-Abuela -dije sonriendo -¿Cómo estas? -me coloque la bota que me faltaba
-Hija. Qué bueno que llamas. Estoy muy bien.
-Me alegra. Oye, me preguntaba si podría ir a verte.
-Claro, sabes que aquí está tu casa. Ya te extrañaba, parecería que te habías olvidado de esta vieja.
-Imposible -dije quitándole el altavoz a mi celular, para ponérmelo en el oído. - Entonces, salgo de aquí inmediatamente,abue.
-Vente con mucho cuidado. Te quiero.
-Igual yo. -colgué.

Tome mi bolso y las llaves del auto, que con esfuerzos le saque a mi papá.

-Sorpresa -gritaron tres personas enfrente de mí cuando abrí la puerta.

Demasiado tarde.

-¿Qué... Qué hacen aquí?
-Pequeña, vinimos a visitarte -dijo Ryan abrazándome, yo solo quería asesinar a Chaz con la mirada.

Entraron en mi casa y se sentaron en el sillón, mirándome.

-¿Qué?
-Venimos a hablar contigo -dijo Chaz, bajando la mirada
-No, ustedes no van a hablar conmigo. Porque ya se van. Fuera de mi casa. Ahora -dije señalándoles la puerta
-Se los dije
-Dije "Ahora"

Se levantaron de nuevo y salieron sin decir nada. Cuando cerraron la puerta me dispuse a golpearla con todas mis fuerzas.

-¿Qué no les dije que se fueran? -abrí la puerta, debido a los golpes -¿Qué haces tu aquí?
-Tenemos que hablar -me empujo dentro de nuevo, cerrando la puerta.
-No quiero hablar contigo, mejor vete con Justin, debe estar esperándote en algún lugar.
-Estas celosa -sonrió
-Claro que no. Voy a salir así que, será mejor que te vayas Giovanna.
-No te vas a ir de aquí, hasta que no me escuches -dijo alzando la voz, eso me hizo retroceder algo hasta caer sentada en el sillón. -Deja de ser tan orgullosa, tienes que escucharme. Yo lamento lo que ocurrió esa vez con Justin, yo no suelo ser así. Solo estaba algo celosa porque no creí que encontrara a alguien tan rápido y quería lastimarte. -su voz se quebró un poco. -Ahora por mi culpa tú no quieres hablar con él y mucho menos escucharlo. El te ama a ti, no a mí. Deberías verlo, escuchar su lado de la historia. Y ser orgulloso no lleva a ningún lado. Bueno si, te lleva a la miseria. Por favor escúchalo. -no me dejo decir nada porque salió de mi casa.

De nuevo comencé a llorar.

Tocaron la puerta de nuevo. Me levante con pesar secándome las lagrimas que no dejaban de salir.

-Por favor, escúchame. -dijo él.