Me coloque la tiara en la cabeza y me mire al espejo. Me veía hermosa con mi vestido color verde de princesa, jamás me había vestido con tanto glamour, pero esta era mi fiesta de Quince años así que no me podía quedar atrás y que los invitados vayan vestidos mejor que yo.
Di tres vueltas en frente del espejo y me reí al darme cuenta que no tenía las zapatillas puestas, no iba a bajar descalza o sí?.
Soy Esmeralda Wright, vivo en Los Ángeles, Ca. Debo decir que Me encanta mi ciudad aunque a veces me gustaría irme a otro lugar más frio por un tiempo. Nadie aguanta los veranos en California, son el mismo infierno. Mi padre me dijo que me regalaría un viaje a Londres por mis quince, ya que es mucho más fresco y es un paisaje muy diferente al que veo todos los días, pero no quiero ir sola. Nadie se divierte solo o si?
Me termine de colocar las zapatillas, eran muy altas a decir verdad; el cambio de zapatillas* que se hará será más bien de tacones a tacones, en vez de tacos a tacones, jajá.
Me coloque mis accesorios y di una vista final al espejo. Me siento bella, y debo admitir que no todos los días me siento así, de hecho casi nunca, ya que no vivo arreglada como mi mama o mi hermana, yo soy más despreocupada. Recuerdo cuando mi mama nos invitó a ir a cenar a fuera, no sabía dónde era así que me puse unos jeans y una chamarra de los Jonas Brothers. Mi mama casi se cae para atrás cuando me ve, y me mando a cambiarme y ponerme un vestido, resulta que íbamos a un restaurante de lujo y si me aparecía así, me confundirían con una mendiga y me sacarían. Bueno, gracias a Dios que eso no llego a pasar.
Abrí la puerta de mi habitación y mire por el pasillo. Nadie. Bien, no tengo que darle explicaciones a nadie de porque no llevo tanto maquillaje. Fue raro que mama me dejara vestirme por mi sola, ya que ella siempre está pendiente.
Se escuchaba el sonido de la música y las personas yendo de un lado a otro. Y Ya había personas haciendo filas para ir al baño. De repente todo el mundo se queda mirando como frisados en mi direccion. Llegue al ultimo escalon y mi hermano me tomo por mi mano izquierda y salude a todos con la otra. Este seria, seguro el mejor cumpleaños de mi vida o al menos eso creo.
~Fin
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para los que no saben que es el cambio de zapatillas, que supongo que son pocos.
Diccionaro:
cambio de zapatillas: es una tradicion de la fiesta de quince en la cual la cumpleañera se sienta en su silla especial y su padre le cambia las zapatillas a unos tacos mas altos, simbolizando el cambio de niña a mujer.
