Una noche un incendio comenzó en la clínica, se expandió pronto y se tuvo que evacuar a los pacientes, una explosión alcanzó mi cuarto. Al apagar el incendio encontraron mi cuerpo calcinado....o al menos el cuerpo que hice pasar como mío.
Ahora estoy muerto para el mundo, ahora tengo libertad para llevar a cabo la misión que me he propuesto. Me he vuelto maestro en manejo de armas: espadas, cuchillos, arcos, hachas, armas de fuego, todo lo que sea necesario para acabarlos a todos. En el bajo mundo he obtenido una larga lista de los Killers, pero al principio sólo tengo contemplados a dos con los que de verdad disfrutaré quitarles la vida. Mi nombre, ya no importa, mi pasado, define mi futuro, mi vida, ya terminó, desde hoy solo seré conocido como... El cazador de Killers.
Boletín de ultima hora: Se ha encontrado el cadáver colgando de una persona en el asta bandera de la plaza principal, se cree que el cuerpo pertenece al asesino deforme que causaba estragos en la ciudad...
Extraído de un diario local: La noche del sábado pasado fue dejado frente a las puertas de la estación de policía el cuerpo en llamas y aún con vida de la asesina autonombrada Lori the Killer quien murió poco después por múltiples quemaduras...
En el callejón se levantaba aquel sujeto con un gran corte en su boca simulando una mueca triste, empuñaba un hacha ensangrentada en su mano derecha, giró rápido su mirada hacia una figura negra situada en el tejado de una casa. -Así que vienes a buscar pelea con el gran Alex Killer....- no terminó su frase ya que el sujeto le clavó una flecha en la garganta...
Gigi la psicópata Killer tenia acorralada a su víctima y lista para matarla se levantó el parche de su ojo dejando ver un hueco asqueroso -¿Quieres saber como perdí mi ojo?- la luz de la noche dejo ver en su rostro una sonrisa mal maquillada. Un motociclista salió de entre la oscuridad y la amarró por la cintura a una cuerda que estaba adherida a la moto y aceleró a máxima velocidad. La asesina fue jalada bruscamente, sus gritos lastimeros, llenos de dolor y súplica inundaban las calles mientras era arrastrada entre el tráfico hasta que el motociclista soltó la cuerda dejando el cuerpo destrozado y sin vida de la chica...
Un mensaje a todos los que se hagan llamar Killers, en especial a Jeff y Jane: Comiencen a sentir miedo porque al final de todo... yo los mandaré a dormir...
